Alcaraz: “Que con 36 años, Djokovic haga lo mismo que cuando tenía 20, es increíble”

Después de ganar a Daniel Evans en la tercera ronda del US Open, y clasificarse así para los octavos de final para enfrentarse el lunes al italiano Matteo Arnaldi, Carlos Alcaraz atendió a los medios de comunicación en la sala principal de conferencias del Billie Jean King Tennis Center, menos fría por el aire acondicionado que en otras jornadas.

Balance entre ganar y disfrutar: “Quiero ganar todos los partidos que juego, pero al mismo tiempo, divertirme, probar cosas diferentes, hacer que la gente disfrute viendo tenis, viendo mis partidos. A veces hablo conmigo mismo sobre lo que es más importante: si gano o hago grandes cosas. Obviamente, ganar los partidos siempre es lo más importante”.

Rutina tras los partidos: “Honestamente, trato de encontrar banderas españolas (sonriendo). Para lanzarles la bola a ellos. No encontré muchas esta vez, así que las tiré a cualquier lugar. A veces encuentra muchas; a veces no demasiadas.

Sensación con las dejadas: “Es una gran sensación (sonríe). Sabes, cuando las hago, y el rival no pude alcanzarlas, es una gran sensación. Me impulsa a hacer otra”.

Remontada de Djokovic: “Vi los dos primeros sets, luego tuve que irme a dormir. Pero, cuando me fui a la cama, pensé que Novak iba a remontar, eso es seguro. Demuestra una vez más que es uno de los mejores de la historia. Lo ha hecho ocho veces, es algo loco. Tener 36 años y hacer las mismas cosas que cuando tenía 20, es increíble. Tenemos que dar crédito por eso, y es algo que admiro”.

Próximo rival (Matteo Arnaldi): “La verdad es que no lo he podido ver mucho. Aunque es verdad que tuve la oportunidad de verlo cuando jugó el Challenger en Murcia, por ser en mi tierra. Ha pasado tiempo y no he podido verlo mucho más. Si está en la cuarta ronda ganándole a jugadores como Norrie es que se merece estar ahí. Es un jugador muy, muy duro. Veremos cómo juega en el día de descanso. Intentaré ver algunos vídeos suyos. Algunos partidos que haya jugado y, a partir de ahí, ver cómo vamos a jugarle, pero obviamente sé que va a ser un partido muy, muy duro, en el que tengo que exigirme muchísimo”.

Acostumbrado al interés del público: Ya llevo dos años en el en el circuito y te vas acostumbrando a este tipo de cosas, que la gente venga de todo el Mundo a animarte, lo cual agradezco muchísimo. No tengo suficientes palabras de agradecimiento a toda la gente que viene de todo el Mundo, no solo en España, sino de cada rincón, para verme jugar, aunque sea un solo partido, para animarme, para estar con conmigo. La verdad que es una maravilla y agradezco un montón ese apoyo”.

Hablar consigo mismo: “Bueno, reprocharte no sirve de mucho, aunque lo haga (se ríe). Intento hacerlo lo menos posible, pero soy un jugador que necesita sacar esa ira de dentro de cualquier manera, pero no sirve de mucho. Sí que es verdad que lo que sí que sirve es hablarte en positivo, que lo hago más de lo que de lo que reprocho. Pero sí es muy importante tener esa autocharla positiva en momentos en los que quizás no están yendo bien las cosas, no te están saliendo como a ti te gustaría. Intentar animarte a ti mismo, pensar que las cosas van a salir bien, que puede sacar adelante la situación, ayuda mucho en el sentido de poder cambiar e ir a mejor”.

Conexión emocional con el público: “Creo que aquí en Estados Unidos les encanta el show. Tienen la pista más grande de del mundo. Una vez entras, te das cuenta de que se vive a algo diferente, la energía que transmite el público de aquí es diferente. Yo creo que mi estilo de juegos concuerda muy bien con lo que quiere la gente de show, de ver cosas diferentes, y eso es lo que trato de hacer muchas veces en mi estilo de juego, cosas diferentes. Es algo que la gente no se espera, y les pone en pie. Intentamos hacer eso en cada partido, yo creo que a la gente de aquí le encanta y yo creo que por eso tenemos una muy bonita conexión aquí de Nueva York”.

Comparación entre 2022 y 2023: “En un año ha cambiado muchísimas cosas. Ahora, aquí la gente te conoce bastante más. Cuando voy a los sitios me van parando un poco más con respecto a al año pasado. Pero ahora mismo, sobre todo, me siento un jugador distinto, un jugador más maduro que tiene claro cómo solventar los problemas. Veo diferente el partido desde dentro, lo cual me ayuda a intentar manejarlo de distinta manera. El año pasado no había jugado aún ninguna semi de Grand Slam. Ahora ya he jugado varias y ya tengo dos títulos, sé cómo manejar ciertas rondas y situaciones de diferente manera. Me notó un jugador más maduro y una persona también más madura”.