Ilusión a raudales de España en Málaga: “El objetivo es ganar”

La Selección española cuenta las horas para su estreno en las Finales de la Billie Jean King Cup (del 13 al 20 de noviembre) en Málaga. El equipo capitaneado por Anabel Medina prepara desde el viernes el asalto a la que sería su sexta copa del mundo de tenis, la primera desde 1998, y este lunes, a tan solo dos días de disputar los octavos de final frente a Polonia, compareció en la sala de prensa del Martín Carpena para valorar un ilusionante evento. “Llevo siete años siendo capitana, y cada eliminatoria es un objetivo nuevo. Estas Finales son especiales, jugamos en casa, la afición de Andalucía es muy buena. Tener este equipo es un privilegio, y creo que estamos listas para empezar”, comentó Medina sobre la cita.

Las opciones de España en el torneo pasan, sobre todo, por la raqueta de Paula Badosa, número uno de la Armada y referente de un equipo en el que también están Jessica Bouzas, Sara Sorribes, Nuria Párrizas y Marina Bassols. La catalana, de 26 años y 12ª del ranking, en plena forma tras una brillante segunda mitad de temporada con la guinda del título en Washington, se podrá quitar también la espina del año pasado que se le quedó en Sevilla, donde no pudo competir a pesar de estar convocada por sus problemas a raíz de una fractura vertebral. “Ha sido una montaña rusa de año, he tenido todas las emociones, pero he acabado bien y en buena forma. Estoy feliz de estar aquí representando a mi país con todas mis compañeras. Con ganas de empezar el miércoles”, explicó en rueda de prensa.

Con una Badosa en un gran momento y un bloque muy sólido, España sueña en grande en Málaga. “Las expectativas siempre las tengo altas, tenemos un muy buen equipo y es una competición diferente a lo que estamos acostumbradas. Aquí, lo importante es cómo estemos como equipo, la energía, cómo nos llevamos... Y eso está siendo muy positivo, es muy importante. Personalmente, estoy con confianza, me siento bien y con ganas de afrontar el reto que tengo, y también con ganas de jugar en casa con los míos”, añadió Badosa antes de que Párrizas, que se mostró muy contenta por jugar en su Andalucía (”como en casa, en ningún sitio”, dijo desatando las risas de sus compañeras), hablase sin tapujos sobre la meta de la Selección. “El objetivo es ganar, obviamente”.

Sobre el papel, y a la espera de que el miércoles se conozca la decisión de Medina, la responsabilidad del otro individual apunta a caer sobre la debutante Jessica Bouzas, que a sus 22 años ha completado el mejor curso de su carrera y ya es 55ª del ranking. “Para mí, es todo estar aquí. Es mi primera vez y quiero dar el 100% tanto dentro como fuera de la pista. Estoy muy feliz. Todas las chicas son geniales, jugadoras increíbles, las llevo siguiendo desde hace tiempo y es genial estar aquí con ellas. Creo que somos un buen equipo”, afirmó la gallega, que en la ciudad andaluza está cumpliendo un sueño dada su predilección por representar a España. “Lo que busco es disfrutar mucho con el equipo, hacer un buen grupo. Si puedo darlo todo, lo haré en pista, y si la capitana me dice que será otra, sé que todas estamos dispuestas a darlo todo por el equipo, que es lo fundamental. Si lo dejamos todo en pista, aunque perdamos, creo que estará todo bien”.

Y si la lógica invita a pensar que Bouzas será la número dos española, lo sensato también era intuir que el dobles, que en caso de jugarse supondría el punto decisivo, estaría compuesto por Sara Sorribes y Cristina Bucsa, medallistas de bronce en los Juegos Olímpicos de París y campeonas del WTA 1.000 de Madrid. Sin embargo, una rotura abdominal de Bucsa hizo que la cántabra se cayese de la convocatoria a última hora. “Recibo la noticia cerca de viajar a Málaga, se lesionó en el último torneo de la gira asiática, intentó recuperarse hasta el último momento, pero fue sincera conmigo y con el equipo. Se dio cuenta de que no llegaba al 100% y que, al venir, hacía que le quitase el puesto a una jugadora que estaba bien. Ha tenido un año muy bueno, sobre todo en dobles, y la modalidad coge peso en esta competición. Con sus resultados con Sara durante el año, obviamente era un dobles a competir”, relató la capitana, Anabel Medina. “Nos coge un poquito a pie cambiado, pero hay que aceptar que el deporte es así. La pareja de Cristina y Sara no se puede formar, pero el equipo tiene diferentes combinaciones para hacer un dobles competitivo”.

Sobre la ausencia de Bucsa habló también Sorribes. “Triste por Cristina, nunca es bueno tener una lesión. Pero lo bueno de este país es que hay muchas jugadoras muy buenas. Con respecto al dobles, hay varias posibilidades, no tengo por qué estar yo en ellas, pero creo que se hará lo mejor posible y que saldremos adelante”, dijo la castellonense, una doble baza española ya que puede rendir a gran nivel tanto en el individual como en el dobles. “Jugar en casa es algo muy bonito, todas tenemos muchas ganas de sentir ese calor extra. Dentro de la ilusión que nos hace a todas, sabemos lo difícil que es levantar ese trofeo, por lo que vamos día a día. Poquito a poco, todas juntas e iremos hacia adelante”.

La sustituta de la cántabra es Marina Bassols, de 24 años y 155ª del ranking mundial, que lamentó la baja de Bucsa. “Me sabe supermal la lesión de Cristina. Yo estoy aquí para dar el 100%, para estar con el equipo, dar lo mejor de mí y lo que se necesite. Si ganamos el título sería fenomenal. Mi objetivo es dar el 100%”, contó la catalana, quien cuenta con el completo apoyo de su capitana. “La incorporación de Marina estaba más que clara, ya ha estado con el equipo en otras ocasiones, siempre se muestra muy dispuesta y es una jugadora que aporta un valor muy grande. No tuve ninguna duda”, desveló Medina, la mandamás de una Selección española que, con respeto a la competición pero sin esconderse, va a por todas y sueña en grande en Málaga.