Apenas unos minutos después de vencer a Stéfanos Tsitsipas en tres sets y colarse por primera vez en las semifinales del Barcelona Open Banc Sabadell, un divertido Carlos Alcaraz compareció en sala de prensa. La joranda había sido dura, con dos partidos y un logro más: a partir del lunes, después de la derrota de Cameron Norrie en cuartos de final, será top deiz del mundo.

Sensaciones tras la victoria. "Estoy muy contento de poder jugar mis primeras semifinales en el Godó. Tuve la ilusión de jugar este tipo de partidos y de rondas en un torneo que he seguido siempre, estoy emocionado de poder jugar".

El abuso de la dejada. "Tsitsipas es un jugador que juega bien desde el fondo, le cuesta correr más hacia adelante que a los lados. Diría que tengo una dejada buena y resuelvo bien (sonrió). Es un recurso que utilizó bastante. Intento a los rivales echarlos para atrás y luego les hago la dejada".

El tercer set. "No se me pasó por a cabeza el partido de Kwon de la primera ronda, pero intenté resetear la cabeza, fui al baño e intenté enfocarme solo en el tercer set".

El ambiente del Godó. "Ha sido increíble, impresionante, se me puso la piel de gallina. Todo el mundo gritando Carlos. Es emocionante poder vivir estas experiencias. Llevábamos un tiempo con limitaciones. Vivir lo de hoy es increíble".

Presión por ganar títulos. "Lo llevo bien. Son piedras que te ponen en la mochila, pero tengo las cosas muy claras. Sigo el camino y no pongo a ningún jugador por delante. Sigo mi camino sin prisa y todo lo que consigo me lo merezco por todo lo que lucho. Espero que lo que no ha llegado, llegue".

Sanción a Tsitsipas. "Nunca vi a nadie irse al baño en mitad del descanso en un set. Creo que él ha querido hacer lo mismo que yo, ha querido parar mi buen ritmo, pero no lo consiguió, creo que sí fue una estrategia para intentar eso". El griego se marchó al baño y tardó un minuto del estipulado por lo que fue sancionado con dos puntos perdidos.

Top ten. "Todo ha venido rápido".