Nadal descansa con dudas para preparar la campaña de tierra
Tras perder la final de Indian Wells, el balear descansa hasta Montecarlo. Tiene problemas en el pecho ("Me era difícil respirar") y le harán pruebas en casa.
El Masters 1.000 de Indian Wells, que había sido fantástico para Rafa Nadal, tuvo un colofón amargo en la final contra Taylor Fritz que el español perdió por 6-3 y 7-6 (5) con problemas físicos que le impidieron rendir al 100%. El estadounidense, que había sido duda antes del partido por una torcedura en el tobillo derecho que padeció en las semifinales contra Rublev, le privó de igualar los 37 títulos de Novak Djokovic en la categoría y puso fin al mejor inicio de temporada de su carrera, que se detuvo en 20 victorias consecutivas.
Pero lo peor fue el poso de preocupación con el que terminó el balear por las molestias en el pecho que le afectaron ya en el histórico duelo del pasado sábado contra Carlos Alcaraz. "No tuve tiempo de verificar lo que me pasaba antes de la final. Me era difícil respirar. Al hacerlo me duele y es muy incómodo. Sentía dolor. No sé aún si es algo en las costillas. Cuando respiro, cuando me muevo, es como si tuviera una aguja todo el tiempo aquí dentro. Me mareo un poco porque es doloroso y me limita mucho", explicó Nadal, que "más que triste por la derrota", algo que aceptó "de inmediato" está "sufriendo un poco".
Su idea, antes de que le ocurriera esto, era no jugar en Miami, descansar unos días y preparar la temporada de tierra batida que para él, si se recupera a tiempo, arrancará en Montecarlo (10 al 17 de abril). Podría llegar a esa cita como número tres del mundo, puesto al que ha subido esta semana, si el Alexander Zverev no lo recupera antes, más cerca cada vez de la cabeza del ranking que vuelve a liderar Novak Djokovic, que relega a Daniil Medvedev. En el Masters 1.000 monegasco coincidiría con los dos.
Pero a Nadal lo que le preocupa realmente es su situación actual: "Necesito saber qué me está pasando, lo que tengo que hacer ahora para recuperarme y cuánto tiempo me va a llevar". El lunes se levantó temprano aún en Indian Wells, antes de viajar a España, donde le harán pruebas. Aunque ha manifestado que este año quiere "jugar más" por que no ha podido hacerlo durante los últimos cursos, sus planes podrían variar. En principio no ha renunciado a ninguno de los torneos que suele disputar sobre arcilla: Montecarlo, Barcelona, Madrid y Roma antes de Roland Garros (22 de mayo al 5 de junio). Su trayectoria en 2022 es brillante con esos 20 triunfos, los títulos de Melbourne, el Open de Australia y Acapulco, y el subcampeonato en el BNP Paribas Open. Y siempre vuelve.