Alcaraz y Bautista ponen a España a un paso de las Finales
El murciano debutó con triunfo ante el rumano Copil (261º) después de la victoria de Bautista contra Boitan (721º) en dos sets. El dobles puede decidir este sábado.
En un día nublado, con más fresco que otra cosa en la habitualmente soleada Marbella, y al ritmo de la charanga que recordó a los viejos tiempos de la Copa Davis en las gradas de la pista Manolo Santana del Club de Tenis Puente Romano (ampliadas para 4.000 personas), una España solvente, sin Rafa Nadal, inició su camino hacia las Finales de la Copa Davis con los triunfos de Roberto Bautista y Carlos Alcaraz en los primeros puntos de la eliminatoria de clasificación contra Rumanía. El castellonense de 34 años y 15º del mundo ganó en dos sets (6-3 y 6-1 en 67 minutos) al desconocido Gabi Adrian Boitan (21 y 721º), que jugó con bastante decencia hasta mediado el primer set antes de venirse abajo. Más tarde, el murciano (18 y 19º) logró el 2-0 para a Selección contra Marius Copil, un tenista profesional, pero lejos de su mejor forma (es 261º con 31 años y fue 56º en 2019), que cayó por 6-4 y 6-3 en 1h32.
El dobles, que en principio disputarán este sábado (11:00, #Vamos) Alejandro Davidovich y Pedro Martínez contra Nicolae Frunza y Horia Tecau, puede ser definitivo. Si hay un tercer triunfo local, sólo se diputaría uno de los partidos individuales restantes.
Boitan estrenó el marcador de la serie con un juego valiente y variado que inquietó de salida a un Bautista un tanto frío. El ganador este año en Doha, que no había visto en su vida a su oponente (“No le conocía y me sorprendió”, reconoció después), tardó en ajustar los mecanismos y sufrió con las dejadas y los tiros rápidos de este. No obstante, poco a poco, sin prisa pero sin pausa, se hizo con el control del encuentro y encontró los defectos del rumano para apuntarse la primera manga con un par de quiebres.
La segunda la inició Rober con otra break tempranero y no sólo no perdió la ventaja, sino que la aumentó en cuanto tuvo oportunidad para poner un 5-1 aplastante que consolidó inmediatamente con su saque. Después de no poder ayudar a España en las Finales de 2021, que se perdió por lesión, Bautista obtuvo su novena victoria en la Davis (9-6) en su 11ª participación.
Debut feliz de Alcaraz
Con los lógicos nervios que le produjo su estreno con España, retrasado por culpa del coronavirus cuando apuntaba a debutar en Madrid el pasado mes de noviembre, Alcaraz creció con el paso de los minutos ante un Copil que tiró de veteranía y aumentó la tensión del chaval con un juego audaz de saque-red y constantes subidas. El acierto de Charly, en medio de la humareda y el olor a hamburguesa provocada por una barbacoa cercana, fue aprender a pasar a Marius cada vez con más precisión y motivado por los consejos del capitán Sergi Bruguera. Así se llevó la primera manga con una rotura para el 6-4 y encaró la segunda con mucha más confianza y soltura. Se esperaba mucho de él y no falló en una pista que conocía bien, porque en 2021 fue semifinalista del ATP 250 de Marbella jugado en el mismo escenario.
Físicamente superior, Alcaraz apretó para abatir a Copil con esa facilidad que tiene para generar potencia en sus golpes (21 ganadores) y la inteligencia para restar cada vez mejor y más abajo los buenos servicios de su contrincante. La gran esperanza de la Armada falló poco (nueve errores no forzados) y mantuvo sus saques con algún apuro para terminar con sensaciones positivas y recibir las felicitaciones cariñosas de todo el equipo español en otro día que nunca olvidará. Ni siquiera Nadal pudo ganar su primer partido en la Davis: lo perdió contra el checo Jiri Novak en 2004 cuando aún tenía 17 años. En esa misma eliminatoria superó después a Stepanek y en las siguientes venció al francés Clement y al estadounidense Roddick, a este con 18 y seis meses. Carlos es el más precoz en ese sentido desde aquel trunfo del balear, con 18 y nueve.