Alcaraz le amarga el día a Italia para meterse en la final
El murciano de 18 años pudo con Berrettini, como hizo el año pasado en Viena, y dos horas y media más tarde venció a Fognini. Se enfrentará este domingo a Schwartzman.
Carlos Alcaraz dio un nuevo paso en su cada vez más prometedora carrera al ganar en una larga jornada que transcurrió entre el sábado y la madrugada del domingo, en el ATP 500 de Río de Janeiro (Brasil), a los italianos Matteo Berrettini y Fabio Fognini para meterse en la final, tercera desde que compite en el circuito ATP tras las de Umag y las NextGen ATP Finals de Milán, ambas en 2021. El murciano, que ya ganó al número seis del mundo el año pasado en Viena antes de perder contra él en cinco sets a principios de este año en el Open de Australia, se impuso esta vez por 6-2, 2-6 y 6-2 en un duelo que se hizo muy largo por culpa de la lluvia. El mal tiempo que castiga estos días a la ciudad sudamericana y que ha provocado continuos retrasos en el torneo, tuvo el partido parado durante más de dos horas, aunque en realidad el juego duró 2h02. Dos y media más tarde, Carlos pudo también con Fognini, que se había deshecho en cuartos del argentino Federico Coria (6-4 y 6-2 en 1h17). Alcaraz venció por 6-2 y 7-5 en 1h45 y este domingo (21:30, Deportes por M+) se medirá por primera vez al argentino Diego Schwartzman en lucha por el título, que sería el tercero de su palmarés. "Intentaré llevar la juventud a mi favor", dice el prodigio de 18 años.
Charly vence por cuarta vez a un top-10, después de superar a Tsitsipas (3º) en el US Open, al propio Berrettini (7º) en Viena y a Sinner (9º) en París durante el curso 2021. La lluvia le vino bien en el duelo ante Berrettini al español, que después de hacer una gran primera manga, en la que pasó por encima de su rival, aumentó sus errores no forzados y sucumbió en la segunda con un parcial de 4-0 propiciado por dos quiebres consecutivos del romano. Después de la tormenta, llegó la calma para Carlos, que se había adelantado en el tercer set (1-0) antes del parón. En la reanudación volvió a ser muy superior al italiano y le sentenció con un 5-2 incontestable, en una racha en la que dejó para la galería un par de puntos gloriosos.
Tras un descanso que, por lo que se vio, aprovechó bastante bien, Alcaraz afrontó el encuentro frente a Fognini con una intensidad tremenda. Así le pasó por encima con un plan que incluyó numerosas dejadas, efectivas contra un rival que no suele esforzarse demasiado para restarlas. La derecha le funcionó al español en esa primera manga y en la segunda fue el revés el golpe que le dio mayores réditos cuando el drive no le corrió tanto.
Caída y reacción
Fognini llevó el partido al barro, tiró de talento y se adelantó, poniendo en peligro el triunfo de Alcaraz, que tuvo que concentrarse mucho para no caer en la trampa, recuperar el terreno perdido y asestar el zarpazo definitivo tras un punto maravilloso en la red que desquició al transalpino en un momento decisivo. Antes había presionado casi todos sus saques, pero sin la fortuna que encontró finalmente para resolver la papeleta en la misma pista en la que ganó hace dos años su primer partido ATP, contra Albert Ramos.