Roberto Bautista sacó a relucir su característica garra ante el siempre complicado Karen Khachanov para acceder a la final del ATP 250 de Doha. El español remontó después de un mal primer set (2-6, 6-3 y 7-5) y ya está en la final, donde espera el georgiano Nikoloz Basilashvili, al que se enfrentará mañana (16:00 en España) en busca de su décimo título individual en el circuito ATP.

El encuentro no comenzó de la mejor manera para Bautista. Apenas pudo hacer daño al resto ante los siete saques directos de Khachanov en la primera manga. Impreciso con el saque, sufrió en todos sus servicios, y acabó cediendo dos de ellos tras conceder cinco oportunidades de break a su rival. Fue en el segundo set cuando Bautista comenzó a resistir ante los ataques del cañonero ruso, no sin sufrimiento.

En su segundo servicio de esta manga, Bautista llegó a salvar hasta siete bolas de break. Khachanov se desesperó al no poder conseguir esa rotura, y fue entonces cuando el español aprovechó la única oportunidad de break que se le había presentado en todo el partido. Coincidió en esta manga que el número de saques directos del ruso descendió (2) con que el acierto de puntos ganados con el primer servicio de Bautista subió (78%). Con este ejercicio de resistencia, el de Castellón forzó el tercer y definitivo set.

De nuevo, Bautista resistió las embestidas de un Khachanov que se anotó otros ocho saques directos en la manga. Sufrió menos con su saque, llegando a conseguir dos juegos en blanco seguidos. El cansancio hacía mella en los tenistas, que se fueron hasta las dos horas y media de partido. Sin que se hubiese producido una sola oportunidad de rotura, Bautista las forzó cuando el ruso sacaba para irse al tie-break. A la segunda firmó el break, y tan solo tuvo que consolidar su saque para llevarse el partido. Se llevó una bonita sorpresa cuando, después de su victoria, su hijo salió corriendo a la pista a celebrarlo con él.

Con esta victoria, Bautista accede a la 19ª final de su carrera, donde actualmente lleva un balance del 50%: nueve victorias y nueve derrotas. El de Castellón aspira mañana al décimo título de su carrera, el primero desde 2019, cuando precisamente ganó en Doha. Desde entonces, Bautista ha disputado dos finales más, ambas en 2021. Una de ellas, curiosamente, también fue en Doha, y ante el mismo rival de mañana: Nikoloz Basilashvili, quien ha vencido hoy al francés Rinderknech por un contundente 6-4 y 6-2 en apenas hora y cuarto. El año pasado, el georgiano se llevó el título venciendo en dos sets (7-6 y 6-2), pero el balance en los enfrentamientos de ambos jugadores favorece al español (3-2). Mañana, desde las 16:00 en España, Bautista espera tomarse la revancha de la última edición.