Djokovic la lía de nuevo: cazado con un militar que participó en el genocidio de Srebrenica
El tenista serbio, que pasa unos días en Bosnia-Herzegovina, fue cazado junto a Milan Jolovic, uno de los militares que participó en el genocidio de Srebrenica en el país.
La polémica sigue persiguiendo a Novak Djokovic allá donde va. El serbio, que está pasando unos días de vacaciones en Bosnia-Herzegovina, ha sido pillado en una foto durante su viaje por el país junto a uno de los militares que participó en el genocidio de Srebrenica, uno de los episodios más dramáticos y sangrientos de la Guerra de los Bosnia en el que fallecieron más de 8.000 bosnios.
La imagen en cuestión fue tomada el pasado día 18 y, en ella, Novak Djokovic aparece junto a Milan Jolovic, excomandante de la unidad paramilitar conocida como los 'Drina Wolves' (Los Lobos de Drina), que participó en el genocidio de Srebrenica y que, pese a ello, no ha sido condenado por crímenes de guerra. A Jolovic también se le conoce por el apodo de 'Leyenda', ya que fue uno de los hombres que salvó la vida del exgeneral serbio Ratko Mladic, quien sí fue condenado por genocidio y crímenes de guerra en 2017. 25 años después de la matanza de Srebrenica, Jolovic sigue negando que se produjera este genocidio.
La fotografía de Djokovic, que también fue cazado junto al líder serbobosnio Milorad Dodik, que pide la independencia de la República Srpska, territorio de mayoría de población serbia en suelo bosnio y que le otorgó un premio a Djokovic en 2020, ha generado mucho revuelo en los Balcanes y vuelve a dejar patente la división de opiniones que hay sobre Djokovic en la región.
Uno de los más críticos con la figura de Novak Djokovic fue el periodista bosnio Dragan Bursac, que en su columna en la web de Radio Sarajevo y en declaraciones recogidas por Al Jazeera escribió. "Djokovic podría haber sido el mejor de todos los tiempos, representar a todo el planeta y ayudar de mil millones de formas. Sin embargo comparte condecoración con los criminales de guerra Radovan Karadzic y Ratko Mladic, canta en la boda de los Dodik y come con los militares que organizaron el genocidio. Podemos decir que el mejor tenista del mundo, fuera de las pistas de tenis actúa como el ministro del Interior de Serbia".
De esta forma Djokovic afronta una nueva polémica en la región de los Balcanes, donde ya fue muy criticado en junio del año pasado con la celebración del polémico Adria Tour en plena pandemia sin ningún tipo de restricción y en el que el propio Djokovic, su mujer Jelena, Goran Ivanisevic o Grigor Dimitrov entre otros, dieron positivo en coronavirus durante la celebración o en los días posteriores al torneo.