Badosa debuta con victoria ante Bolsova y Sorribes la acompaña
Badosa, que no había ganado ningún partido en el torneo, venció a otra española, Bolsova. Se enfrentará a la kazaja Putintseva. Sorribes pudo con Konjuh y le espera Kerber.
Quizá con más dificultades de las previstas, Paula Badosa ganó el primer partido de su carrera en Wimbledon (en 2019 cayó en primera ronda). La suerte hizo que en su estreno tuviera que enfrentarse a otra española y buena compañera, Aliona Bolsova, que tampoco había jugado nunca en el Grand Slam británico y plantó cara a la 30ª favorita. Hizo que el partido fuera competido y se resolviera en tres sets: 6-2, 5-7 y 6-2 en 1:45. Badosa, que impuso su buen momento de forma y su confianza, se enfrentará este jueves en segunda ronda a la kazaja Yulia Putintseva, que ganó a la búlgara Pironkova (6-3 y 6-1).
Paula utilizó su buen servicio (10 saques directos) para poner tierra de por medio en la primera manga, ante una Bolsova que se dio cuenta de que tenía que ser más agresiva si quería tener alguna opción frente a su compatriota. Lo hizo y por eso igualó el partido en el segundo parcial.
Encorajinada, Badosa, que ya había ganado dos veces a Aliona, salió a por todas en el tercero. Con dos quiebres y minimizando los errores, se aseguró su primer triunfo en el major de la hierba. “Me viene bien jugar bastante y pasar por todas las situaciones: tranquilidad, nervios y cambio de chip en el tercer set. Quizá no ha sido mi mejor día, pero he sacado adelante el partido", dijo la catalana nacida en Nueva York, que habló sobre las peligrosas condiciones del césped: "Está un poco más resbaladizo que otros años, quizás por la humedad de los días de lluvia, hay que ir con un poco de cuidado. Esta superficie es un reto, todo va muy rápido. Pocas veces las cosas están bajo tu control. Todo se iguala y me gusta. Aspiro a ganar lo máximo posible".
Sorribes tira de músculo y clase contra Konjuh
Sara Sorribes se labró una victoria magnífica ante la croata Ana Konjuh para meterse por segunda vez en su carrera en la segunda ronda de Wimbledon. La castellonense de 24 años y 50ª del mundo, que participa por cuarta vez en el torneo, venció a la croata Ana Konjuh (23 y 119ª) por 6-3, 3-6 y 6-3 en 2:15, y se medirá este jueves con la campeona de 2018, la alemana Angelique Kerber.
Sorribes tiró de su buen físico y de la habilidad que tiene para ejecutar el revés cortado y las voleas. Así contrarrestó el poder atacante de su rival, que le colocó 47 golpes ganadores. La clave fue que ella cometió sólo nueve errores no forzados, mientras que la balcánica se disparó hasta los 51. "Dentro de estar jugando en hierba la pelota se pone muy grande y cuesta que se vaya fuera porque es difícil moverla. Intenté aguantar las embestidas que me venían y tratar de aprovechar mi oportunidad", explicó Sorribes sobre su notable precisión.
"Sería muy bonito romper la barrera de la segunda ronda, pero intento no ir más allá y jugar el mejor partido posible. Buscar mis armas, apretarle y hacerle daño. Voy poco a poco y necesito tener los pasos muy bien asentados para mejorar. Ojalá pueda romper ese trecho y pelearé con todo para hacerlo", afirmó al hablar de su próximo encuentro ante Kerber y del deseo de superar por fin la segunda ronda en un Grand Slam.