Final Djokovic-Nadal en Roma, el capítulo 57 de su rivalidad
El serbio domina por 29-27 en el balance global y 16-12 en finales. Esta será la 29 entre ambos. El español busca su décimo título en Italia; su rival, el sexto.
Se acerca el segundo Grand Slam de la temporada, Roland Garros, y los mejores aprietan. Tras cuatro finales consecutivas de Masters 1.000 sin componentes del Big Three, Novak Djokovic y Rafa Nadal disputarán este domingo (17:00, #Vamos) la de Roma. La cita eterna, la madre de todas las rivalidades, la más repetida en la historia del tenis vivirá en el Foro Itálico su capítulo 57. Aún domina el serbio en el balance global (29-27) y en el de finales (16-12). Esta será la 29ª. En tierra, la historia es diferente. Ahí manda el español: 18-7 y 8-4 en partidos con el título en juego. En cuanto a Roma, será ya el lugar donde más veces se hayan enfrentado, nueve, por delante de las ocho de París. De momento, Rafa allí gana por 5-3, 3-2 en la última ronda. Y, agárrense, uno de los dos o ambos han estado en la final del torneo italiano siempre desde 2005. Esta será la 12ª para cada uno.
Nadal persigue su 10º trofeo en la capital transalpina, donde Novak triunfó cinco veces y es el vigente campeón. ¿Y cómo llegan al duelo? El español tuvo un día plácido el sábado. Ganó en dos sets y con facilidad al gigante estadounidense de 23 años y 2,11, Reilly Opelka (doble 6-4 en 92 minutos). Nadal, que no ha perdido nunca una semifinal romana, estuvo brillante con el servicio (75% de primeros y un 84% de puntos ganados con ellos), mejor que un cañonero que acumulaba 77 aces en cuatro partidos y que ante el manacorí se quedó en 11. Arañó un quiebre en cada set y no se desgastó después al resto.
Físicamente, en principio, estará más fresco que Djokovic, que tuvo que jugar dos partidos y pasar cinco horas en pista por el aplazamiento el viernes, por culpa de la lluvia, de su duelo contra Tsitsipas. El balcánico perdía por 6-3 y 2-1 con break para el griego cuando el choque se reanudó por la mañana. Estuvo varias veces contras las cuerdas, pero escapó cual Houdini (3-6, 7-5 y 7-5) y por la tarde encaró al local Sonego. Tras un arranque plácido, el compromiso se le complicó y tuvo que poner los cinco sentidos para superar al entusiasta turinés de 26 años (6-3, 6-7 (5) y 6-2).
Los 'mayores'
"Yo también he tenido una semana durísima, con muchas horas de tensión y exigencia física y mental", dijo Nadal al respecto de su supuesta ventaja. Djokovic se ve bien: "Tras mi victoria contra Tsitsipas bromeé con Nadal sobre el hecho de que los 'mayores' no nos rendimos. Sé que dijo que él, Roger (Federer) y yo lo somos, pero no estoy de acuerdo. Seguimos con energías, y reí con Rafa sobre eso. Es fantástico jugar otra final ante mi más grande rival de siempre y en tierra siempre es una motivación extra".