Lara Arruabarrena: cuatro roscos para volver a un cuadro principal siete meses después
La española, campeona en 2012 y finalista en 2017 y 2018, ganó con dobles 6-0 sus dos partidos de la previa. Bolsova y Parrizas pasan a la segunda ronda.
Lara Arruabarrena (San Sebastián, 29 años) puso fin este domingo a un calvario de malos resultados que le habían impedido jugar en el cuadro principal de un torneo WTA desde hace algo más de siete meses, cuando cayó eliminada en la tercera ronda del Praga Open 125, a manos de la belga Maryna Zanevska. Por aquel entonces era la 150 del mundo, un ranking que le ponía muy difícil entrar directamente a los torneos sin pasar por la previa. Ahora es la 167ª y en la Copa Colsanitas de Bogotá logró pasar el corte de una manera contundente. Ganó los dos partidos de qualy sin ceder un solo juego, con cuatro roscos ante la canadiense Zhao (426ª) y la colombiana Monroy (1.148ª).
Desde aquel torneo checo, Arruabarrena cayó en la primera ronda de la previa de Roland Garros y del Open de Australia. Tampoco pudo avanzar en torneos ITF ni hace unas semanas en la gira mexicana que pasó por Guadalajara y Monterrey, donde logró su única victoria en todo este tiempo, ante la italiana Cocciaretto (111ª). Quizá ese fue el primer signo de la mejoría que le ha llevado a poder disputar por fin un WTA 250 en una plaza que se le da bien, porque allí, en Bogotá, ganó en 2012 uno de los dos títulos que atesora en su carrera (el otro es el de Seúl en 2016), y después jugó las finales de 2017 y 2018.
Torneo con color español
Lara se enfrentará este martes (sobre las 20:00) en primera ronda a otra colombiana, Jessica Plazas (894ª), en un torneo con nutrida presencia de la Armada, ya que también participa la segunda favorita de la Copa, Sara Sorribes (debutará el martes a las 17:00 ante la italiana Sara Errani), que se enfrentará, si vence, a Aliona Bolsova, otra tenista de la Armada que pudo con la ganadora de 2018, la eslovaca Schmiedlova (6-4, 3-6 y 6-1). Es la segunda victoria de 2021 para la catalana de origen moldavo. Nuria Parrizas, quien accede por primera vez que accede al cuadro principal de un 250, ganó a su compatriota Cristina Bucsa, que también se estrenaba en la categoría, por 6-3 y 6-2. Se medirá con la rumana Bara o la neerlandesa Rus.