El mayor temor de Osaka
En una entrevista a la WTA, la tenista analizó cómo ha superado sus miedos y también habló sus nuevos objetivos. "Quiero completar mi colección de Grand Slam".
Naomi Osaka demostró en el Open de Australia por qué a día de hoy es la tenista más en forma del circuito WTA. A sus 23 años la tenista japonesa se hizo con el título en Melbourne en el que supone su cuarto trofeo de Grand Slam.
Osaka pasó por el podcast WTA Insider para analizar cómo se sentía tras haber conquistado este nuevo éxito y las sensaciones demostradas en el torneo. "Creo que me siento abrumada. Después de ganar en Nueva York, realmente quería empezar el año muy bien y creo que no hay mejor torneo que ganar que éste. Estas dos semanas he tenido una visión muy clara de lo que quería lograr. Aunque no ganase quería mantener una actitud muy buena y demostrar que pelearía cada punto y lo intenté como pude. Eso me llevó al triunfo. Pero sinceramente también habría estado satisfecha si no hubiera ganado el título".
La tenista japonesa también habló sobre su cambio de mentalidad y cómo exteriorizar sus sentimientos para dejarse ayudar cuando tenía problemas. "Cuando era más joven quería hacerme cargo de todo. No quería molestar a nadie con mi estrés y mis cargas. Pero después de hablarlo con Wim Fisette (su entrenador), me dijo que es más fácil para él que hablemos de las cosas que me preocupan que encerrarme con mi equipo. Creo que eso me ayudó mucho y ahora es toda una rutina. Al principio fue difícil, porque no quería molestar a nadie y apenas hablo con personas que no son de mi familia. Era extraño decirles que me sentía incómoda, estresada o triste.
Osaka también confesó que poco a poco va perdiendo miedo a su principal temor: lo desconocido. "Antes de la final les dije que estaba nerviosa, no sabía qué podría esperar. Creo que ese es el mayor miedo para mí, lo desconocido, el no saber qué va a pasar. Pero supongo que es parte de la vida y es un privilegio el poder jugar aquí ahora. Todos entrenan para jugar la final de un Grand Slam, y debería estar feliz por haber llegado hasta aquí".
Tras conquistar el Open de Australia, Osaka ya se pone como metas Roland Garros y Wimbledon, donde afirma que también podría defenderse bien pese a estar más acostumbrada a jugar sobre pista dura. "En tierra batida siento que no juego mal. El año pasado jugué muy bien pero no llegué tan lejos en el Grand Slam como muchos esperaban. Pero esto es un proceso. Creo que tengo todo lo que necesito para hacerlo bien en tierra batida y hierba, pero tengo que sentirme cómoda. Es posible que no me sienta cómoda del todo en estas superficies porque no jugué en arcilla o hierba de pequeña y sí lo he hecho en pista dura. Creo que solo me falta más experiencia. Los problemas en arcilla es algo mental. La última que jugué en Roland Garros perdí con Siniakova pero tuve oportunidades. Recuerdo que pude ganar pero al final no salió como quería. Cuanto más juego, me convierto en mejor tenista".
La conquista de Wimbledon y Roland Garros aparecen en el horizonte de Osaka para completar su particular colección de Grand Slam. "Me siento emocionada por triunfar en Wimbledon y Roland Garros. Es como si tuvieras la sensación de hacer algo por primera ver y ser bueno en muchas cosas. Esa es mi prioridad. Y también quiero completar mi colección de Grand Slam. Me faltan dos torneos y es como si los estuviera persiguiendo como a los Pokémon".