Sara Sorribes es una de las tenistas que perdieron en alguna de las dos primeras rondas del Open de Australia (la castellonense perdió en su debut contra la local Gavrilova) y se han quedado en Melbourne para disputar el Phillip Island Trophy, el torneo WTA 250 que se organizó para compensar a las jugadoras que quedaran eliminadas pronto en el Grand Slam oceánico. A Sorribes, de momento, le ha merecido la pena no volver a España, porque este sábado ganó por 6-7 (6), 6-1 y 7-6 (4) a la rusa Liudmila Samsonova, que en el major apeó hace unos días a Paula Badosa antes de caer contra Garbiñe Muguruza.

La española, que pudo haber cerrado la victoria con su saque antes del desempate del tercer set, se medirá en segunda ronda con la japonesa Misaki Doi, que venció en dos sets (7-5 y 6-3) a la francesa Caroline García, una de las cabezas de serie (10ª) de un evento al que también se apuntaron Sofia Kenin (1ª), Danielle Collins, Sloane Stephens, Anastasia Pavlyuchenkova, Johanna Konta, Nadia Podoroska y Bianca Andreescu (2ª), entre otras. 

Badosa también estaba en el evento que se disputa en las pistas libres de Melbourne Park e iba a medirse el domingo en la primera ronda con la australiana Maddison Inglis, pero finalmente se dio de baja y su lugar en cuadro lo ocupó la rusa Rakhimova. 

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