Badosa evita el aislamiento y se entrena por fin de madrugada
Paula Badosa y su entrenador, Javier Martí, que dieron positivo por COVID en la cuarentena y fueron trasladados a un hotel medicalizado, practicaron pasadas las 00:00.
La jugadora que peor lo ha pasado desde que el circuito aterrizó en Melbourne, Paula Badosa, es de las pocas que ha podido librarse del aislamiento al que tuvieron que someterse la mayoría de sus compañeros después de que se diera a conocer que un empleado que trabajó en el hotel Grand Hyatt había dado positivo por COVID el miércoles. La española nacida en Nueva York fue la única tenista que se contagió durante la cuarentena y por ello fue traslada el 21 de enero a un alojamiento medicalizado, donde finalmente recaló también su entrenador Javier Martí, que contrajo también la enfermedad.
Ambos pudieron por fin realizar un entrenamiento en la madrugada de este jueves en las instalaciones de Melbourne Park, donde no habrá jornada y sí se permitirá trabajar a todos los que no tengan que someterse a los test que pasarán las personas que pudieron estar en contacto con el trabajador que dio positivo y a los que obtengan un resultado negativo ahora. Lo hicieron pasada la medianoche del miércoles. "Qué sensación, primer golpe después de 21 días de encierro. Libertad", escribió Badosa en sus redes sociales junto a unas fotografías de su primera sesión de preparación para el Open de Australia.