NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

TENIS

Svitolina: "Cuando entré en el Top-10 lloraba si perdía partidos"

La tenista ucraniana, número 5 del ranling WTA, repasó en Behind The Racquet cómo fueron sus inicios en el tenis y la presión que le ponían sus padres.

Elina Svitolina recibe asistencia médica durante su partido ante Naomi Osaka en el Open de Australia 2019.
PAUL CROCKAFP

Elina Svitolina se ha consolidado como una de las grandes jugadoras del circuito WTA. Sin embargo, detrás de su exitosa trayectoria se esconde una historia marcada por el sacrificio, la constancia y el hacer frente a la presión que le imponía su familia.

La ucraniana se sinceró en Behind The Racquet, donde repasó cómo ha ido forjando su carrera y los duros momentos tras las derrotas, algo que parece haber superado. "En comparación con otras jugadoras, mi trayectoria ha sido gradual. Siempre intentaba dar un paso a tiempo, intentando no perder el momento de mejorar mi juego. He jugado eventos de 10.000 dólares, de 25.000 dólares y de ahí pasé a los Grand Slams. Jugué en los torneos más grandes e intenté entrar en el Top-10, pero me puse mucha presión. No importa qué ranking tienes, siempre quieres más. Cuando era la 30 del mundo, pensé 'Si estuviera en el Top-10 sería feliz', pero cuando me encontraba en el Top-10 lloraba después de perder partidos. Eso nunca termina y nunca es suficiente. Aprendí a disfrutar cada partido, incluso en las batallas más duras. He estado en el Top-10 durante tres años y es importante mantener un estado de ánimo constante y trasladarlo al juego".

Svitolina repasó también cómo logró forjarse su propio camino para superar los momentos difíciles. "Cuando estaba dando el salto de juniors al circuito profesional, tenía muchas dudas. La gente espera que mejores más rápido y te comparas con otros jugadores de tu misma edad pero con ranking más alto. Tienes esa voz negativa en tu cabeza y pero también tienes que dejar de lado las dudas y trabajar duro cada día porque, en el tenis, todos trabajan duro pero solo unos pocos jugadores muestran buenos resultados. Es muy importante allanar tu propio camino y esto te ayudará en los momentos difíciles".

La ucraniana hizo hincapié en la presión que le ponían sus padres, que le han acompañado en sus partidos hasta hace cinco años y cómo este hecho repercutió en su tenis. "Pienso que lo más duro fue que mis padres se implicaran en el tenis. No importa cuando o dónde jugara, ellos siempre me seguían. Los padres que se implican en el tenis, especialmente cuando te intentas hacer una carrera, te añaden una presión extra. Esta mezcla de presión de mi familia y mis expectativas fue muy duro, especialmente cuando perdía en primera ronda y luchando por mejorar mi ranking. Mis padres querían que ganara cada partido. En un momento dado es importante para cada padre dar un paso al lado y mis padres lo hicieron hace cinco años. Fue mi importante para mí tener mi propia independencia. Cuando mis padres dejaron de viajar conmigo, no contaba con ellos. Si perdía un partido, solo era culpa mía y así encontré mi camino. Todavía pienso en mi infancia. Quizá podría haber sido mejor que mis padres no me hubieran empujado tanto. Sin embargo esos duros momentos me han ayudado a convertirme en la persona que soy".

Por último Svitolina hizo balance de todo lo que ha dado el tenis, su vida. "Salí al circuito muy joven. Tengo un hermano mayor que solía jugar al tenis y empezamos a viajar a torneos cuando era pequeña. Fue un desafío estar lejos de casa, pero cuando pensaba en mis objetivos y lo que quería lograr, eso me motivaba. Quería reiniciar mis objetivos cada año para que no pareciera un ciclo constante de viajar y perder, porque perdía casi casa semana. Me marqué metas a corto y a largo plazo. Eso me ayudo a seguir. Jugar delante de la gente y ganar torneos me dio energía y motivación. El tenis me lo ha dado todo. Soy muy afortunada de haber elegido el tenis como mi profesión porque me ha enseñado mucho: disciplina, conocer a gente fantástica y conocer lugares increíbles. El tenis me ha dado la vida".