Cierra el hospital creado en las instalaciones del US Open

A principios de abril, el Centro Nacional de Tenis Billie Jean King, que alberga anualmente el Grand Slam neoyorquino del US Open, se transformó en un centro de lucha contra el coronavirus. La pista Louis Armstrong, que durante años fue la principal, era un comedor donde se preparan 25.000 comidas diarias para enfermos y personal sanitario, entre otros trabajadores. Otras partes del complejo se utilizaron de hospital dado la alta cantidad de infectados registrados en Nueva York. Fueron un total de doce campamentos de campaña. Ahora, según apunta Ubitennis, este apartado está preparado para cerrar.

El último paciente tratado fue dado de alta el pasado martes, anunció el director Danny Zausner en la web del torneo. En los próximos días, el personal se encargará de eliminar las estructuras y desinfectarlas. Afortunadamente, el hospital desde la segunda quincena de abril (un período de máxima dificultad para las instalaciones de Nueva York) nunca ha agotado todas las camas disponibles. La instalación destinada a repartir comidas será la última en cerrar, ya que continuará distribuyendo alimentos hasta el 22 de mayo para los sanitarios.

Durante las últimas fechas, la Asociación de Tenis de Estados Unidos (USTA) no ha descartado posponer el torneo a una fecha posterior en el 2020, pero por el momento mantiene la prevista del 24 de agosto al 13 de septiembre. Una de las opciones para el US Open es que se celebre en Nueva York, pero sin público, algo que no convence a los responsables de la USTA. De ahí que hayan pensado en otra localización, en el desierto de California, un estado donde la orden de confinamiento podría ser levantada pronto. El Indian Wells Tennis Garden, con capacidad para 16.000 espectadores, es el segundo estadio más grande de tenis de EE UU. Por ahora, todo en el aire.