El Open de Australia contempla jugar a puerta cerrada en 2021
Según Craig Tiley, director del torneo, el primer Grand Slam del calendario contempla dicha posibilidad en función de cómo evolucione la pandemia.
¿Volverá a haber tenis en 2020? Esta es la pregunta del millón que sobrevuela a protagonistas y aficionados de este deporte para lo que queda de temporada a causa de la crisis sanitaria mundial por el coronavirus. Muchas son las voces autorizadas que consideran un riesgo innecesario volver a las pistas sin una vacuna, otras apuntan a que es preferible retomar la acción a puerta cerrada a que crezca la montaña de torneos cancelados... Pero el abanico de posibilidades parece que va más allá del presente curso, ya que en 2021 aún podrían tomarse medidas contra el COVID-19 para garantizar la continuidad de los torneos.
Es el caso del Open de Australia, primer Grand Slam del calendario que ya contempla la edición del año próximo a puerta cerrada. Así lo confirmó Craig Tiley, presidente de Tennis Australia y director del torneo, en un comunicado oficial emitido el pasado martes: "Con tal dependencia de los viajes internacionales, estamos estudiando lo que podríamos hacer si los jugadores deben ser puestos en cuarentena por un cierto período antes de que puedan moverse libremente en Australia. Si las reuniones masivas aún no están autorizadas o son muy limitadas el próximo año, estamos considerando la posibilidad de organizar un evento para su transmisión (sin público). Estos son solo dos de los muchos escenarios que debemos considerar. Debemos estar preparados para una evolución del contexto. No está claro qué medidas se utilizarán actualmente para contener la propagación del virus y las que aún deberán implementarse a mediano y largo plazo".
Así pues, en función de cómo evolucione la pandemia en un país que actualmente cuenta con más de 6.000 infectados y 50 fallecidos por coronavirus, se tomarán las medidas oportunas para que todo siga en pie. Aunque Australia no se encuentra entre los países más afectados a nadie le extraña ya que uno de los posibles escenarios sea que las pistas de Melbourne cierren las puertas a los aficionados, ya que muchos de los tenistas (junto a su cuerpo técnico, periodistas y un largo etcétera) sí viajarían desde lugares realmente afectados por la pandemia. El Open de Australia podría ir un paso por delante...