En Brisbane, donde disputa con Serbia la ATP Cup, Novak Djokovic dio la voz de alarma sobre la posibilidad de un retraso en el inicio del Abierto de Australia (20 de enero al 2 de febrero), debido las condiciones de intenso calor y humo provocadas por los incendios forestales que asolan estos días una zona cercana al norte de Melbourne, el estado de Nueva Gales del Sur, próximo a Victoria, donde se celebra el primer Grand Slam del año. El serbio, presidente del Consejo de Jugadores, dice que "hay que considerarlo debido al clima extremo y a las condiciones".

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Si la calidad del aire no mejora en los próximos días, Djokovic cree que los organizadores del torneo deberían estudiar la posibilidad de tomar la medida más drástica, el aplazamiento del campeonato. Al balcánico le preocupan los problemas de salud que podrían tener los jugadores. "Sería, probablemente, la última opción. Pero si las condiciones afectan la salud, hay que tenerlo en cuenta", dijo Nole, que anunció la convocatoria de una reunión del Consejo que preside, antes del Open, para discutir las alternativas.

Djokovic reveló que mantuvo conversaciones con el director de Tennis Australia, Craig Tiley, quien le dijo que había sido monitorizada la calidad del aire en Melbourne y en Sídney (capital de Nueva Gales del Sur), una de las sedes de la ATP Cup donde juegan los Grupos C y E y en la que se disputarán todos los cruces a partir del próximo jueves. "Están rastreando la situación todos los días a medida que evoluciona. Si continúa de la misma manera y se ve afectada Sídney, creo que se verán obligados a establecer algunas normas al respecto".

"Es difícil para ellos porque el calendario tiene que ser respetado, el Abierto de Australia comienza en un momento determinado, por lo que hay muchas cosas involucradas. Pero un problema de salud es igual para cualquiera", continuó Djokovic, que explicó como había experimentado problemas con el aire en algunos torneos en China, pero lo que ocurre ahora allí es algo sin precedentes: "Sé que en China las condiciones de juego son muy duras en función de la calidad del aire, pero esto es algo diferente: nunca antes había tenido este tipo de experiencia. Ya veremos. Espero que se disipe, pero si se mantiene así, tendremos una reunión del Consejo en una semana o diez días y discutiremos esto con seguridad si las condiciones siguen siendo las mismas". El sudafricano Kevin Anderson, vicepresidente del sindicato de tenistas, respalda a su líder: "Esperemos que no sea un problema, pero si lo es, necesitaremos tener una conversación sobre si es peligroso estar ahí afuera".