En el Mutua Madrid Open de 2007, Juan Carlos Ferrero y Carlos Moyá se enfrentaron por última vez como profesionales. Era su 14º duelo y ganó el primero, que dejó el balance en un 8-6 a su favor. Más de 11 años después, estas dos leyendas, que fueron numero uno del mundo en su día, se han batido de nuevo el cobre en la tercera edición de la Senior Masters Cup que ha vivido su primera jornada este viernes en el Club de Tenis Puente Romano de Marbella. Ganó de nuevo Ferrero (6-1, 1-6 y 10-5) y este sábado (19:30, +tdp) jugará la final contra Marat Safin, armario ropero ruso de dos cuerpos que se llevó por delante al gran Goran Ivanisevic (7-6 (4) y 6-2). Al croata de 47 le costó agachar el lomo ante un rival de 38 con el que tuvo un breve encuentro en el circuito ATP (1-1).

Pero el partido estelar, el que todo el mundo esperaba, era el de los españoles campeones en Roland Garros quienes, bromas verbales aparte, se tomaron muy en serio el partido. Dos tipos a los que nos les gusta perder ni a las chapas, una cualidad de la que aprendió el mismísimo Nadal. Al valenciano de 38 años se le vio más fino, más ligero que al mallorquín de 42, con más cuerpo que mover. Ferrero apenas ha cambiando, sigue siendo ese junco sin apenas fisuras en su juego que alcanzó la gloria en el tenis. Aún le pega a la bola de maravilla tanto de derechas como de revés. Moyá no desmereció con algún passing lujoso, tiros planos y alguna dejada con retroceso que levantaron los aplausos del numeroso público que de dejó caer por el Puente Romano.

No faltó espectáculo, con remanguillé de Carlos y willy de Juanki incluidos. Al final, en el desempate, se impuso el de Ontinyent, que destronó al campeón del año pasado y se medirá a Safin, con quien se vio 12 veces cuando eran profesionales: van 6-6, hoy se deshará extraoficialmente el desempate. Seguro que merece la pena verlo. A Moyá también volveremos a verle en la exhibición de dobles (18:00) en la que hará pareja con Ivanisevic para jugar contra Pato Clavet y Albert Costa.