Serena vuelve a ganar en Wimbledon dos años después
Serena Williams regresa con victoria a un Grand Slam que ganó siete veces y en el que no jugaba desde 2016. Venció sin problemas a la holandesa Rus.
A Wimbledon le falta algo desde hace dos años. Echaba de menos a su reina, la siete veces ganadora del Grand Slam londinense Serena Williams. La estadounidense, que ilusionó con su regreso en Roland Garros el pasado mes de julio aunque después echó un jarro de agua fría al retirarse antes de jugar en octavos contra Maria Sharapova, volvió a pista la hierba de la pista 1 del All England Tennis Club. Lo hizo con una victoria aparentemente sencilla ante la holandesa Arantxa Rus (27 años y 105 del mundo) en dos sets y 88 minutos: 7-5 y 6-3.
Serena se sintió "feliz por haber dado lo mejor" de sí misma y haber sido capaz de superar el reto de jugar una primera ronda en Wimbledon, que siempre es peligrosa, por primera vez desde 2016. Después de marchó a los vestuarios, para ducharse y poder estar con su hija, Olympia. Le ayudó su saque (cinco aces y un 76% de puntos ganados con primeros) y los 23 winners que sumó en total.
En el torneo es la cabeza de serie número 25, pese a que su actual ranking es mucho más bajo (181), pero Wimbledon decidió concederle ese privilegio. Hace dos años fue campeona, como en 2015 cuando venció en la final a Garbiñe Muguruza. Su peor resultado en el campeonato ha sido caer en la tercera ronda, algo que le ha ocurrido solo tres veces (1998, 2005 y 2014). En la segunda ronda se encontrará con Tomova, búlgara de la previa que ganó a la checa Smitkova por 7-6 (3) y 6-1. Rival también asequible contra la que puede seguir poniendo a tono su mejorado físico, aunque todavía se le vea un poco pasada de peso. Esta vez, los rigores de la tradición británica le impidieron lucir un atuendo tan estrafalario como el que eligió en París, pero aún así incorporó unas medias marrones que se desmarcan un poco del protocolario blanco del resto de la equipación. Puede hacer lo que quiera, se lo merece.