Federer sufre ante Youzhny para firmar su peor arranque ganador

La delgada línea roja que separa un plácido partido y el fracaso es más fina en los grandes torneos. El último en comprobarlo, por partida doble, ha sido Roger Federer. El suizo tenía dominado su partido de segunda ronda, pero se topó con un aguerrido Mijail Youzhny, 101 del mundo, que le puso contra las cuerdas y cerca estuvo de enviarlo a casa... pero el físico le abandonó en el set decisivo. Federer pasa a la tercera ronda tras tres horas y 11 minutos, victoria muy sufrida (6-1, 7-6, 4-6, 6-4 y 6-2). Segundo encuentro a cinco sets en este US Open, nunca había empezado con tantos problemas un Grand Slam. La sensaciones no son buenas.

Youzhny comenzó frío el partido y lo pagó muy caro. En un abrir y cerrar de ojos el ruso se vio con 5-0 en apenas 20 minutos. Fallaba mucho con el servicio y sobre todo sumaba muchos errores no forzados, acabó con 13 el primer set. Mientras, Federer jugaba cómodo: convertía el 80% de los puntos con el primero y el 67% con el segundo. No tenía problemas. Todo iba encaminado a una rápida victoria, pero Youzhny no estaba por la labor. Fue de menos a más, evitó el rosco y se puso 2-0 en el segundo set. Federer apretó y enmendó el primer break, pero los errores comenzaban a caer de su lado y el ruso seguía en línea ascendente.

Todo parecía un espejismo. 5-4 en el marcador y todo de cara, pero Youzhny cambió el partido. Apretó, igualó a 5 y forzó el tie-break. Las tornas habían cambiado y Federer sólo pudo capear el temporal. Los fallos que evidenció al principio se reprodujeron el tie-break, el peor momento. Youzhny empataba y sacó su mejor tenis en años. Así se apuntó también el tercer set, con Federer anestesiado. El suizo fallaba mucho (13 errores en el tercer set) y no aprovechaba su primer servicio (59% de saques con el primero). Su rival se movía cómodo. La diferencia de ranking no era tal y el número 3 mundial seguía naufragando.

Ida y vuelta. Es la mejor manera de resumir el partido. Cuando mejor estaba jugando Youzhny, resurgió Federer. Comenzó a errar menos, apretó al ruso al resto... y el físico abandonó al tenista de Moscú. Entro el fisio a la pista, sus molestias no revertían gravedad, pero Federer fue a más. No bajaba los errores, pero se puso 3-1. Después 4-1 con un juego en blanco, sólo tuvo que mantener su saque. Todo quedaba para el quinto set. La igualdad era la tónica, pero con 1-1 y 30-30 un calambre atenazó al ruso. El público estremecía, los gestos de dolor eran claros... pero era algo pasajero. Se rehízo y aguantó hasta el 3-2, pero estaba cojo. Federer le rompió el juego para ponerse 4-2. Cumplió con su saque y con un nuevo break cerró el choque. Mucho castigo para dos partidos 'plácidos', ahora le espera Feliciano, Federer no convence.