Nadal llegará a Wimbledon sin ninguna victoria en hierba

Rafa Nadal llegará a Wimbledon, desde el 23 de junio, con sólo un partido sobre hierba. Dustin Brown, 85º del mundo, le despidió a las primeras de cambio del ATP 250 de Halle (Alemania) por un rotundo 6-4 y 6-1 en sólo 59 minutos. La complicada transición de la tierra a la hierba no comenzó bien para el número uno, que sólo cuatro días antes estaba levantando el trofeo en Roland Garros.

“Este partido no tiene ningún valor de preparación de cara a Wimbledon”, advirtió Nadal, que lo calificó como “negativo desde todos los puntos de vista”. “No pude adaptarme”, reconoció. Entre otras cosas, porque la espalda le sigue dando problemas: “No pude entrenar el saque en estos últimos días por la espalda; va mejor, pero no pude sacar toda la potencia”.

Brown, alemán de origen jamaicano, sólo había logrado una victoria frente a un top-10 en su carrera, este año ante Isner en Houston. Elástico, con rastas y más pinta de jugador de baloncesto que de tenista, tuvo claro el patrón de saque y volea. Nadal, sin embargo, jugó sin chispa. Metido atrás y superado cuando subía.

La “lotería” a la que se refería en la previa que supone el juego en hierba se reflejó en el primer set, donde no aprovechó la única oportunidad de break que tuvo, en el séptimo juego, mientras Brown le rompía para 6-4. Sólo un punto más ganó el alemán. Cualquier desliz decide en el pasto.

El nueve veces campeón en París se desconectó. Brown encadenó seis juegos (hasta el 5-1) y luego sacó para ganar. Nadal, pues, se va de la Centre Court del Gerry Weber Open a la Central del All England Club, de la que es una réplica, con el casillero a cero en hierba. En La Catedral perdió en segunda ronda en 2012 y en primera el año pasado. Al menos, tomó contacto con una superficie cada vez más agresiva para sus rodillas antes de buscar su tercer título en Wimbledon.