Vini somos todos

Merecido desagravio.- Como la Liga ya terminó para el equipo de Ancelotti la noche del Clásico del Camp Nou (¿recuerdan el gol anulado a Asensio por el pelo de una gamba y la roja perdonada a Gavi?), solo queda el orgullo de camiseta y ponerse serio en las cosas serias. Y lo de Vinicius lo es. El mundo entero ha encendido las alarmas por los tristes acontecimientos vividos en Mestalla el pasado domingo, con parte de la grada profiriendo cánticos e insultos racistas contra el brasileño. El Madrid entendió que tenía que dar un paso adelante y el madridismo recogió el guante en esa lucha contra el racismo que debe ser de TODOS, sin excepciones ni justificaciones basadas en gestualidades más o menos defendibles. El fútbol y sus piques son una cosa que va en el lote de este deporte desde que se inventó en Inglaterra hace dos siglos; y el racismo, otra mucho más grave. Por eso me encantó la solidaridad de sus compañeros, con toda la plantilla, incluidos suplentes y lesionados, luciendo la camiseta de Vini y su 20 antes del partido con el Rayo de Iraola. También la pancarta gigante del Fondo Sur: “Vinicius somos todos, basta ya”. Vini, vestido de negro, agradecía a pie de césped el gesto de sus compañeros y de la afición. Y el ‘homenaje’ se completó dejando Florentino que se sentase a su derecha en el Palco. Vini comprobó que como ‘vicepresidente’ ocasional tiene ganado el cariño del pueblo. No paró de firmar autógrafos a la gente de la tribuna y fue aclamado desde que aterrizó por esa zona que lógicamente nunca ocupa. Conclusión: Vinicius ha comprobado en primera persona que la gente le quiere de verdad. Y debe valorar que España no es un país racista. Hay racistas en el fútbol, eso sí. Pero entre todos los echaremos de los estadios...

Rodrygo, solidario.- No estaba Vini por unas pequeñas molestias en la rodilla (eso de que Competición le indultó para ayudar al Madrid era una chorrada), lo que permitió a Benzema y Rodrygo enseñar sus armas. Karim, cojo y todo, firmó un gol precioso que no le va a dar el pichichi (Lewandowski está a cinco y solo quedan dos partidos por jugar), pero le permite llegar a los 30 en total por quinta temporada consecutiva. El show lo puso Rodrygo, ‘hermano’ de Vini, que puso el 2-1 de la victoria (tras el empate de RDT), con un gol de vivo muy de Rodrygo. Lo celebró con el puño derecho en alto para reivindicar la lucha contra esta lacra. ‘Rodry’ ya acumula 17 goles y 10 asistencias en lo que va de curso. Temporadón.

Feliz efeméride.- Este apartado llega hoy cargado de caviar. El 24 de mayo es una fecha especial porque en el mismo día se ganaron la Octava y la Décima. El 24 de mayo de 2000 cayó en París la Copa de Europa ganada tras golear al Valencia (3-0), con un golazo final de Raúl recorriendo 55 metros en solitario antes de batir a Cañizares. Y hace nueve años, en este día de gloria vikinga, Sergio Ramos batió a Courtois en Lisboa y salvó al madridismo de tener que aguantar a los atléticos presumiendo de una Copa de Europa que para ellos habría valido por diez. Sergio, siempre serás nuestro héroe de la Décima.

El Pizjuán.- Quedan dos partidos y hay que despedir el curso con dignidad. Este sábado hay un partidazo en Sevilla, aunque los de Mendilibar estarán pensando en la final de Budapest y el Madrid en las vacaciones. Pero vuelve Vini y la afición se merece una alegría después del chasco del Etihad. Ganar a la tropa de Monchi en su guarida sabría a gloria. Y que Vini haga magia con la pelotita...