Triunfo. Buen partido entre Celta y Atlético, con dos equipos con buenos futbolistas, acciones de gol... Encuentro bonito para el espectador, de los que hacen afición. El Atlético se llevó el choque en los instantes finales al tener mejor acierto que su rival. Se lo mereció el conjunto del Cholo, que puso todo en liza para llevarse los tres puntos. Julián Alvarez marcó el tanto del triunfo tras un pase prodigioso de Griezmann. La Araña metió la puntera y batió al portero del Celta. Un tanto de listo, de pillo, de estar bien colocado y atento al centro de su compañero. Excepcional noticia para el equipo rojiblanco, que sigue en la puja con Barcelona y Real Madrid. El triunfo es vital para el equipo madrileño. Muchos esperaban un tropiezo rojiblanco para descabalgar a los de Simeone, pero tendrán que esperar.
La Araña. No ha cuajado un buen inicio del campeonato, pero todos en el Atlético tienen total confianza en el delantero argentino. Ante el Celta se vio a Julián Alvarez con ganas y parece que va mejorando conforme pasan los encuentros. El Atlético tiene mucho banquillo esta temporada y lo demuestra cada jornada. En Bilbao decidió Correa. En Vigo, Julián. Hay mimbres. Y hay que tener paciencia. De momento, picotazo de oro.
Giuliano. Simeone le dio la titularidad a su hijo. Giuliano no jugó como delantero, su posición natural, sino que se le vio por la banda izquierda, como teórico carrilero zurdo. Sufrió pero él mejor que nadie sabe que para jugar en el Atlético hay que apretar los dientes y sufrir mucho. El Celta buscó su banda aunque Giuliano no desentonó. Hay que darle confianza al canterano rojiblanco. Y minutos.
Aspas. Ha sido uno de los grandes jugadores de nuestra Liga y ante el Atlético se le vio con ganas de hacer un gran partido. Aspas nos ha ofrecido grandes encuentros en el equipo gallego, y aunque pudiera parecer que le pesan los años, cuajó un buen choque. Contra el Atlético cumplió 500 partidos con el Celta. Estuvo a punto de marcar un gol, pero Oblak hizo la parada del encuentro. Se dice pronto. Enhorabuena.
Oblak. Salvó al Atlético con esa parada, una acción clave. En el segundo tiempo también realizó otra intervención muy buena. El cancerbero del Atlético ha comenzado flojo la temporada, pero está yendo a más. Oblak es uno de los mejores porteros del mundo y el Atlético parece que ha recuperado su nivel defensivo de antaño. El equipo ha recibido solo tres goles en los siete encuentros disputados. Con Giménez como jefe de la defensa y con Oblak así, es complicado que a los de Simeone le hagan goles. Y mantener la portería a cero es prioritario.
El derbi. Llega uno de los partidos más esperados de la temporada, el derbi. Habrá que estar atentos a lo de siempre: a que el colegiado sepa repartir justicia. Nada más. Ni nada menos teniendo al Real Madrid de por medio. Una de las noticias positivas del encuentro en Vigo fue que el Atlético no tuvo ningún lesionado. Sin descanso por las decisiones de Tebas, pero regresa de Vigo con la moral por las nubes.