Un misterio llamado Andriy Lunin
Cuando llegó al Madrid hace seis años procedente del modesto Zoryá Lugansk pocos vieron que el ucraniano iba a ser un porterazo hasta que un año más tarde levantó con su país el Mundial Sub-20, dando muestras de su talento bajo palos. Pero a partir de ahí la vida deportiva de Lunin fue un misterio salpicado con tres cesiones fallidas, al Leganés, Valladolid y Real Oviedo, más unas suplencias continuadas en la portería del Bernabéu. Todo cambió para él este año con la gravísima lesión de Courtois, lo que le permitió dejar postales eternas entre el madridismo militante como la inolvidable tanda de penaltis del Etihad.
Pero la realidad es tozuda e incuestionable: Courtois es el mejor portero del mundo y nadie puede discutir la titularidad del belga. Lunin se debate entre la opción de renovar y aceptar su rol secundario en un club en el que es querido, o llegar con una buena oferta de un club dispuesto a pagar un buen dinero al Madrid y sentirse importante allá donde se vaya. El hecho de que Jorge Mendes sea ahora su agente hace pensar en que está más cerca de la salida que de su continuidad en el equipo en el que ya ha ganado dos Champions. Además, si Lunin decide hacer la maleta ya es sabido que Kepa está como loco por volver a un club del que se ha enamorado. Sea lo que sea, el suplente de Tibu será un portero de garantías.