“Todos los segundos cuentan...”
“Todos los segundos cuentan…”, dijo este sábado por la mañana Enric Mas, en referencia a la bonificación que se le escapó el viernes en el Alto del 14%, puerto de paso de La Vuelta. Podía sonar raro que en una carrera que lideraba Ben O’Connor con casi cinco minutos, Primoz Roglic centrara su objetivo en un bonus de 6 segundos. Pero el ciclismo moderno es así. Se decide, a veces, por pestañeos. El mismo Roglic ha recortado un día después otros 56 segundos, que sumados a los anteriores ya superan el minuto. Todo suma.
También conocimos en la misma jornada cómo Pablo Torres, un joven valor del pelotón español, perdía el Tour del Porvenir por solo 12 segundos ante Joseph Blackmore, tras una portentosa exhibición en el Finestre, donde ha batido los récords de ilustres profesionales como Rujano, Froome y Landa. A sus 18 años, Torres proyecta a fenómeno, pero no podrá lucir el Porvenir en su palmarés, a pesar de haber sido el mejor, con dos espectaculares victorias, porque se despistó el viernes con la gestión de una fuga en la que se coló Blackmore cuando él vigilaba a otro rival. Su gesta final recuerda a la de Carlos Rodríguez en esta misma ronda en 2021, cuando dominó la última etapa y se quedó a 7 segundos de desbancar a Tobias Johannessen. Casi un calco.
El premio gordo de perder carreras por un suspiro se lo lleva, sin embargo, Demi Vollering, a quien vimos llorar hace una semana tras ceder el Tour de Francia por 4 segundos ante Katarzyna Niewiadoma, pese a su triunfo en el Alpe d’Huez. Lo suyo fue todavía más cruel. Por un lado, porque tres días antes sufrió una caída a seis kilómetros y no tuvo ninguna ayuda de sus compañeras del equipo SD Worx. Por otro, porque en 2023 también perdió la Vuelta a España por 8 segundos ante Annemiek van Vleuten, pese a vencer en los Lagos de Covadonga. Dos guiones casi idénticos que sitúan a Vollering como un caso atípico, al ver esfumadas dos grandes en un total de ¡12 segundos! Ya lo dice Mas: “Todos los segundos cuentan…”.