Minuto 93. El Atlético dejó congelado al Bernabéu en el minuto 93. El gol de Marcos Llorente propició el empate ante el Real Madrid e hizo que los de Simeone sumaran un punto de oro de cara al futuro liguero. Un punto, que tal y como estaban las cosas, se puede considerar de muy importante. El Cholo le ha ganado la partida a Ancelotti esta temporada, puesto que el conjunto madridista no le ha podido ganar al Atlético en los dos choques ligueros. El empate hace que el Real Madrid no se vaya de manera definitiva en el campeonato. Tanto techo cubierto para que Marcos Llorente dejara en silencio al Bernabéu.
La Copa. Durante muchas fases del partido dio la impresión de que el Atlético pensaba más en el partido copero ante el Athletic que en el propio derbi. Durante muchas fases del encuentro el Atlético pareció ir con una marcha menos, pensando en el choque del miércoles en el Cívitas Metropolitano. Porque no fue el equipo de Simeone el atrevido y aguerrido de otras veces. Los jugadores del Cholo se mostraron muy cautos a la hora de entrar a la pelota y apenas arriesgaron más de lo necesario. Nadie quiso correr ningún riesgo en forma de lesiones. Había mucho en juego, pero no lo pareció. La Copa es un torneo que gusta mucho, que agrada tanto a técnicos como jugadores y afición. Pero un derbi es un derbi, bien lo saben todos. Marcos Llorente sí fue a por todas en la jugada del empate y esa decisión y valentía le dio al Atlético el punto.
Ocasiones. No tuvo mucha suerte el Atlético de cara al gol, puesto que tuvo ocasiones muy claras para marcar. Pero en esta oportunidad la pelota no entró. Lunin hizo buenas paradas y Griezmann se quedó con las ganas de volver a marcarle al Real Madrid esta temporada. Tuvo ocasión, pero el guardameta estuvo más listo.
Oblak. El cancerbero jugó su partido 425 con la camiseta del Atlético e igualó a Calleja en el ránking de partidos históricos con el equipo rojiblanco. Oblak ya sólo tiene por delante a Koke, Adelardo, Tomás, Collar y Aguilera. El portero esloveno es para muchos el mejor guardameta en la historia del Atlético y se ha ganado el cariño y la admiración de la hinchada del Metropolitano. Ante el Real Madrid tampoco tuvo que realizar grandes intervenciones.
Riquelme. Simeone confió en el ilicitano para el nuevo derbi: había jugado ya los tres anteriores esta temporada. Pero Saúl se mostró como apático y a veces desespera con su juego. Por si fuera poco, el colegiado Sánchez Martínez le enseñó amarilla por una entrada a Valverde. Amarilla inventada por el colegiado murciano que no quiso saber nada en una acción sí merecedora de amarilla de Bellingham de a De Paul. Pero ya se sabe de los criteros arbitrales en el Bernabéu. Ni en un manotazo de Nacho a Morata. Y Saúl fue protagonista en la jugada del gol anulado a Savic. Riquelme, al que Simeone le pide más, fue titular y se quedó fera tras el descanso. El canterano está haciendo una buena temporada, pero en el Bernabéu estuvo flojo. Lleva razón el Cholo: hay que pedirle más.
El colegiado. Sánchez Martínez estuvo en su línea. Lo siento por mis amigos de la Peña de Lorca, pero el murciano es horrible. En el tema de las tarjetas, fue un disparate. Y en la jugada del gol anulado a Savic pregunto qué hubiera sido de suceder al revés. El tanto hubiera subido al marcador, es obvio. Una acción en la que el portero del Madrid estaba dentro de su portería cuando remató Savic. La afición del fútbol español está muy harta ya con los árbitros y lo que sucede jornada tras jornada. Lo mejor es el punto y que el Atletico acabó sin lesionados pensando en la Copa.