Sin sensación de plenitud
Tras la derrota en el derbi, al Real Madrid se le nota menos suelto, como si el puzzle no acabase de encajar: le sobra por aquí, le falta por allá.

Percepción y realidad, un constante dilema en el fútbol. Le afecta al Real Madrid, ganador de 11 de los 12 partidos que ha disputado esta temporada, un registro casi impecable que no rompió la Juve. El Madrid avanza rápido en la Copa de Europa y encabeza la Liga en vísperas de su enfrentamiento con el Barça en el Bernabéu. Sin embargo, no existe una sensación de plenitud en el juego del equipo.
Alonso recurrió a Güler para formar lo que parece su trío preferido de centrocampistas: el turco junto a Tchouameni y Bellingham. Ha invertido tiempo y oportunidades en preparar a Güler para ajustarlo a su nueva posición. Frente a la Juve jugó su primer partido ante una de las tradicionales grandes potencias del fútbol europeo. No importa la posición que ocupe en la liga italiana, la Juve merece el máximo respeto.
Güler se esforzó en cumplir una por una todas las tareas encomendadas. Jugó bien, pero todavía no le alcanza para ser el centrocampista dominante en la arquitectura del Real Madrid. Kroos y Modric lo fueron. Güler tiene 20 años, explora una posición nueva en el equipo, de gran responsabilidad, porque el Madrid anda escaso de verdaderos arquitectos.
Todo indica que Tchouameni, Bellingham y Güler integrarán la línea de centrocampistas, salvo que Alonso devuelva a Valverde a su posición natural en el medio campo. Dependerá de la decisión con Carvajal, lesionado durante las cuatro últimas semanas y en condiciones de regresar.
Será interesante observar la idea de Alonso con respecto a Valverde en el Clásico y en el resto de la temporada. ¿Tiene la titularidad asegurada, como parecía antes de comenzar la temporada? ¿Ocupará la banda derecha, por la que se pelean hasta cuatro jugadores (Mastantuono, Brahim y, en menor medida, Rodrygo y Güler, en caso de abandonar posiciones más interiores? ¿Puede jugar en la posición de Tchouameni si el francés se retrasa al centro de la defensa?
Valverde es un jugador admirable, querido por la hinchada, lleno de recursos y energía, uno de los mejores ida y vuelta del fútbol mundial en los últimos años. Es capitán, además. Esta temporada, Valverde se ha sentido menos cómodo, ha pagado el precio de su versatilidad en un momento delicado: cambio de entrenador y nueva competencia en el medio campo, esencialmente el proyecto de Alonso con Arda Güler.
Algo de todo esto se detectó en las tensiones que siguieron a la derrota con el Atlético, de la que todavía quedan restos. Al equipo se le nota menos suelto, como si el puzzle no acabase de encajar: le sobra por aquí, le falta por allá. Necesita pulirse. En ciertos casos, la derrota en el Metropolitano ha afectado al rendimiento de los jugadores, el de Carreras más que ningún otro. Pasó un mal rato frente a la Juve en el primer tiempo. Se recuperó en el segundo. El domingo le espera Lamine Yamal. Será uno de los emparejamientos más analizados.
El Madrid sufrió mientras el partido con la Juve estuvo presidido por el rigor táctico. El gol de Bellingham, precedido por una brillante jugada de Vinicius, rompió el partido y liberó algo más al Madrid. Pero antes y después –la parada en el último minuto– Courtois desmontó las ocasiones de los rivales del Madrid. Ha ganado tantos partidos, sobre todo en Europa, como cualquiera de los grandes delanteros que ha tenido el Madrid. Su contribución ha sido y es apoteósica.
Noticias relacionadas
¡Tus opiniones importan! Comenta en los artículos y suscríbete gratis a nuestra newsletter y a las alertas informativas en la App o el canal de WhatsApp.
¿Buscas licenciar contenido? Haz clic aquí







Rellene su nombre y apellidos para comentar