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La visita del Real Madrid a Cáceres cumplió con todo lo que suele suceder en estas rondas de Copa del Rey. Para el equipo de menor categoría es el partido del año, en este caso el de su vida, y van a dar absolutamente todo lo que tengan dentro, con lo que, si no igualas en cierta medida ese estado emocional, se puede complicar la cosa. Esto sucedió.

También suele pasar que, si este mismo conjunto no aprovecha su momento de partido, llevado por el ímpetu de la importancia del escenario, en cuanto la gasolina empiece a escasear y aparezca el mínimo espacio, los futbolistas top te deciden el encuentro en una acción. Aquí apareció Rodrygo para sellar el pase con un gol magistral con dedicatoria para ‘O Rei’.

Es cierto que en esta competición de cuando en cuando estas máximas no se cumplen y saltan las sorpresas. El Madrid no estuvo bien, no se adaptó al terreno de juego con balón y no igualó la agresividad de los locales sin el mismo. Todos los honores para el Cacereño que compitió de maravilla y cayó haciendo un gran encuentro.