Pichardo se pica con Jordan

Las finales de la Diamond League pusieron el broche a la temporada de atletismo al aire libre con una doble jornada en el estadio Rey Balduino, que repartió los 32 diamantes a 16 campeonas y 16 campeones. No estuvieron todos los protagonistas del curso atlético, con notables ausencias como las de Noah Lyles, Grant Holloway y Jordan Díaz. Y otros que sí estuvieron, acabaron atragantados. El año ha sido largo. Y muy exigente. Quien ha terminado tan sobrado como empezó es Armand Duplantis, que en tres saltos se embolsó la joya. Eso sí, no atacó el récord. “Mis piernas están tiesas”, se excusó Mondo. Si él lo dice. A Jakob Ingebrigtsen le sirvió de desquite de los Juegos en los 1.500, aunque dos días después reventó en su debut en la media maratón en Copenhague. Seguro que el diamante no le ha compensado la pérdida del oro olímpico, aunque Pedro Pichardo parece no pensar lo mismo.

Tras vencer en triple salto, el cubano nacionalizado portugués puso en mayor valor su victoria de Bruselas que el oro de París. Una extraña afirmación que vuelve a destapar su pique con el cubano nacionalizado español Jordan Díaz, que en esta campaña le ha batido en los dos escenarios principales: los Europeos y los Juegos. Los compatriotas de nacimiento ni se hablan. Después de Roma, el luso puso en duda la medición del salto de Jordan, que voló hasta 18,18, la tercera mejor marca de la historia. Y después de París, donde perdió por solo dos centímetros, no contrapuso ninguna excusa, aunque anunció su posible retirada. Un escozor que se reconfirma con su declaración del sábado. Díaz, de vacaciones, ni siquiera le ha dado la oportunidad de la revancha en la Diamond. Esta tendrá que esperar a los Mundiales de Tokio 2025. Si Pichardo no se retira, que no parece que vaya a hacerlo. Las palabras del pasado proyectan ahora una cita explosiva en el futuro.