Pellegrini manda, el Betis titubea y Canales no basta

El Betis sumó su primera derrota de la temporada y con ella encontró algunas debilidades tan esperadas como preocupantes. Sin atrevimiento, sin verticalidad, esbozó carencias que impidieron lograr más premio en un escenario de altas dificultades como el Bernabéu. Pero bajo ese contexto, el equipo verdiblanco sigue luciendo más méritos que temblores. Pellegrini dirigió otra muestra de intenciones que esta vez se topó con una realidad inapelable: fue imposible amenazar al Madrid sin Fekir ni William Carvalho. Sin ellos, el deseo es más utópico. Sobre todo si enfrente Tchouameni baila sobre el césped y Vinicius destroza líneas.

Antes de ese 2-1 definitivo, el Betis titubeó cuando quizás pudo dar un paso adelante. Tal vez no pudo. Tal vez tembló. Pero los propios jugadores supieron que haría falta algo más que mirar el reloj para llevarse algo positivo del Bernabéu. Borja luchó, Guido corrió, Álex Moreno amenazó. Pero sólo Canales supuso un desafío real al equipo de Ancelotti. Y el cántabro no bastó. Al menos esta vez. Marcó, lo celebró en silencio y dejó los mejores destellos del duelo en cada control o cada conducción. Entonces echó de menos a Fekir. Sin esa conexión, todo fue más previsible en el plan del Ingeniero.