Ya he comentado en varias ocasiones que el Atlético nunca fue un club que tuviera una especial sensibilidad hacia todo lo suyo. Pero de un tiempo a esta parte la entidad madrileña ha cambiado. Y para bien. Digo esto tras el emotivo homenaje que el Atlético ha rendido a Diego Pablo Simeone. Un acto en el que estuvieron presentes compañeros suyos en su etapa de jugador del conjunto rojiblanco, futbolistas de la actual plantilla, jugadores que han estado a sus órdenes en estos once años... También su familia, así como los dirigentes de la entidad madrileña. Algo sencillo, pero que nos hizo pasar un buen momento y recordar los éxitos que ha cosechado el Atlético en estos últimos años. También hubo derrotas duras, dolorosas, pero el Cholo volvió a incidir en que hay que levantarse en las situaciones complicadas. Tras tantas muestras de apoyo, quedó claro que nadie entiende un futuro inmediato sin el Cholo.
Un club no sólo es ganar títulos, aunque a algunos puede que únicamente les importe eso. Pero hay valores que están por encima de muchas cosas. El Atlético está rindiendo homenajes a las que han sido sus Leyendas. Ahora, Simeone. Hace unos días, Futre. Sucedió igual cuando Koke superó a Adelardo. Futbolistas que han hecho felices a mucha gente y que han dejado impronta entre los aficionados reciben ahora su homenaje. No hay club en España que sepa mejor valorar a sus Leyendas que el Atlético. Y eso es motivo de orgullo. Motivo para estar orgulloso. Muchas veces se dice que el Atlético es algo diferente a los demás y en este caso sí que lo es. Dirigentes, exjugadores, futbolistas, cuerpo técnico, utilleros, empleados.... Incluso la Prensa. Toda la familia del Atlético arropó al Cholo en una muestra de apoyo y agradecimiento al técnico. El aficionado se sentirá reflejado cuando vea las imágenes de este homenaje. Se sentirá pleno. Enhorabuena Atlético. Enhorabuena por mostrar esa otra forma de entender la vida.