Ó noso xeito
Puedo ponerme purista y decir que todos lo somos, pero no es cierto, una sabe cuándo es “de provincias”. Y ese es mi caso. En Ourense lo aprendes desde la infancia. El Corte Inglés no existe aquí, no hay aeropuerto ni metro, tampoco es sede de grandes conciertos ni salimos mucho en las noticias mientras nadie saque los pies del tiesto. Pero en esta diferencia también nace un pundonor que, independientemente de los colores propios, hará que todos seamos hoy seareiros del Arenteiro.
Esta lección me la enseñaron mi padre y mi abuelo hace más de veinte años, el 20 de enero del 2000. También con la Copa del Rey como telón de fondo. En el sorteo, en octavos, al Ourense, que ya no existe como tal (otro día ya si eso hablamos de cómo se trata ahora al deporte en nuestra provincia), le había caído uno de los ‘gordos’, el Barcelona de Louis van Gaal. Fuimos de los pocos afortunados con entrada para aquella noche histórica en O Couto. Recuerdo que quería ponerme una bufanda de mi equipo, qué menos para ver a Guardiola, Luis Enrique, Rivaldo… “Hoy vamos con el Ourense”, me dijeron.
Y es que cuando eres de provincias tienes que escoger ser de un grande para llevarte alguna alegría, pero este es un axioma que solo está vigente mientras los tuyos de corazón no juegan contra ese grande. E hoxe farémolo ó noso xeito.