Entre el todo y la nada

El Betis camina por una delgada línea roja que puede suponer un cualitativo salto hacia delante o un pequeño tropiezo en su afán de crecer. Tiene a la Real a la vista y a un puñado de perseguidores deseosos de arrancarle ese preciado lugar europeo que logró saborear en las dos últimas campañas. El Villarreal pasó por delante. El Athletic amenaza desde cierta lejanía. Incluso, ¿el Sevilla? Hay 21 puntos en juego y se mezclan los miedos y las ambiciones en el Betis.

Ir al Camp Nou siempre fue un desafío para Pellegrini, que siente que es el momento de definir su plan para redirigir este cierre de Liga de la mejor manera posible. ¿Tiene las piezas para ello? Él cree que sí. Dictamina que su plantel será competitivo en cada duelo y no duda que así será también esta noche. Por mucho que la afición no tenga claro si mirar hacia delante o hacia atrás. Hay demasiados condicionantes en cualquiera de los casos. Y por eso hacer cuentas no es viable. Pero entre miradas a la clasificación también hay un aliciente por delante que tiene al Barça como primer enemigo. Sabe Pellegrini lo que es tumbar a un grande pese a que su equipo no atraviese su mejor momento. ¿Está Ayoze capacitado para mostrar al fin su versión más efectiva? ¿Puede Luiz Henrique dar un paso más en su afán por demostrar que es diferencial? Entre ellos bailará Canales. El que siempre prefirió ser valiente a tener miedo. Y a esa mentalidad se agarra hoy Pellegrini.