Noche de terror para España
No serán de oro, pero aún pueden ser de bronce. En una noche para olvidar, la peor que se recuerda a España en mucho tiempo, la generación campeona de nuestro fútbol, la que hace un año nos hizo conquistar el mundo y explotar de felicidad en Sídney, perdió la opción de luchar por la gloria olímpica. Un día terrorífico en el que no salió nada bien, una acumulación de errores que se produjeron cuando la cima estaba a solo dos pasos. Las españolas no parecían las mismas, irreconocibles. Escondidas.
Aún queda una final por el bronce ante Alemania para irse de Francia con un buen sabor de boca. Sin embargo, quedará esta derrota ante Brasil como una mancha en un año histórico de nuestras chicas, campeonas del mundo y de la Nations League. Sirva también como aviso de que el equipo debe mantenerse vivo, pues las rivales aprietan y los años no pasan en balde para nadie. Y también sirva para valorar lo logrado en los meses anteriores, llegar a la cima de la manera perfecta, jamás imaginada. Seguir manteniéndose, ser las futbolistas referentes del planeta, enamorar con ese fútbol virtuoso que ellas solas parecían hacer.
Sería muy triste reducir todo el trabajo extraordinario de este grupo a un solo partido y a una sola derrota. Habrá quien aproveche para sacar punta al batacazo. Mejor quedarse con lo bueno de una selección histórica que aún puede ser bronce en unos Juegos. No es poca cosa, chicas. Valoradlo. A por ello.