No me fío de las peritas en dulce
Les prometo que no me ha alimentado el optimismo el sorteo por fácil que parezca a priori. Al Madrid le va el rock and roll, el estruendo, el aroma de las remontadas imposibles, los rivales con tronío y pedigrí... Este equipo entra en combustión en complicidad con el Bernabéu cuando llegan equipos tipo PSG, City, Chelsea, Bayern o Liverpool. Por eso, que en la ruta a octavos entren tres teóricas Marías, como llamábamos en la universidad a las asignaturas teóricamente facilonas, no me convence del todo. Hubiese preferido un equipo inglés en el bombo 2 y un Nápoles o Inter en el 3. A estos tres equipos les ha pasado por encima el Madrid en estas últimas temporadas y el problema ha sido de ellos.
Lo que más me motiva es lo del Celtic, que me trae recuerdos de juventud con aquella remontada en el Bernabéu en 1980, en una tarde de San José con Juanito, Benito, Pirri, Stielike y Santillana en modo remontada. Levantaron el 2-0 de Glasgow con un partidazo bestial. En cualquier caso, el camino hacia la 15 ha empezado y lo normal es que el vigente campeón llegue a octavos sin rasguños y con el traje impoluto. Teniendo al mejor entrenador (Ancelotti), al mejor jugador (Benzema), al mejor cerebro (Modric), al mejor joven (Vinicius) y al mejor portero (Courtois), nada es imposible...