Never too late
No es que de golpe me haya vuelto un devoto de la lengua de Shakespeare (siempre saqué sobresaliente en el inglés escrito, pero un aprobado raspado en el hablado), pero el titular de este artículo (‘Never too late’) no es de mi cosecha. Es la cabecera que utiliza el boletín oficial de la UEFA sobre la final para definir al Real Madrid. ‘Nunca es demasiado tarde’. Un eslogan que vale para definir la fortaleza que la tropa de Ancelotti ha adquirido en este tipo de situaciones donde los blancos ejecutan a sus rivales en la foto finish de sus partidos. Parece que a la gente le va la marcha y algunos vikingos me decían ayer junto a Wembley que casi mejor “empezar perdiendo con el Borussia para luego remontar como siempre”.
Pues perdónenme, pero creo que va siendo hora de disfrutar de otra Champions (¡la 15!) sin tener que tirar del desfibrilador. Recuerdo la final de Cardiff, con ese 4-1 a la Juventus de Buffon con una segunda parte de ensueño. O el segundo tiempo ante el Liverpool de Klopp en Kiev, con la famosa chilena de Gareth Bale a Karius. Asumo que no hay gloria sin sufrimiento, pero abogo por disfrutar de una final ante los alemanes que permita ver a un Madrid triunfal sin necesidad de esperar al extra time del descuento para celebrar un gol heroico de Joselu, Modric o Lucas Vázquez. Llega la hora de volver a hacer Historia. De levantar otra Orejona. La 15. La Niña Bonita...