Morata no aguantaba más. Y por eso se marcha del Atlético. Así se lo comunicó a dirigentes, cuerpo técnico y compañeros del equipo rojiblanco. No aguanta más la falta de respeto que muchos aficionados han mostrado con él en el campo, en la calle, con su familia... Internacional con España, campeón de la Eurocopa, cuarto rojiblanco en ganar un titulo de Eurocopa con la selección española y el primer capitán de un jugador del Atlético en recoger un título con España. Se dice pronto. Pero Morata ha dicho basta. Querido por los entrenadores que ha tenido, adorado por sus compañeros, respetado por sus rivales... Pero eso no ha sido suficiente. Morata se marcha harto de las mofas, de las bromas alrededor de su persona. El delantero ha marcado 21 goles y dado cinco asistencias con el Atlético esta pasada temporada. Se va a Italia, donde espera recuperar la felicidad que ha perdido entre nosotros.
El que venga le hará bueno o menos bueno, dependiendo del rendimiento que ofrezca. Quince goles en LaLiga no parecen muchos, pero hay que meterlos. Se ha ido Saúl, se irá Savic, se marcha Morata, también se fue Hermoso... El Atlético afronta una regeneración. Sinceramente creo que lo necesita. Necesita gente joven, con hambre, con ganas, que transmita esa ilusión que transmiten los jóvenes. Pero los que se van merecen respeto. El Atlético tiene un nombre en el fútbol europeo gracias a gente como ellos. Me apena que Morata se vaya para tratar de olvidarnos a todos. Algo falla cuando un jugador así dice que ya no puede más. Su marcha trastoca los planes de la dirección deportiva del Atlético, que tiene trabajo para buscar un delantero goleador. Suerte en su nueva aventura.