Marcus Thuram, entre la necesidad y la economía
El Atlético convive con un problema de gol evidente. La figura del killer se despidió del Metropolitano el día en el que Luis Suárez hizo las maletas y los tiempos de Forlán, Agüero, Falcao, Costa, Torres o el Griezmann que veía la portería enorme han quedado atrás irremediablemente. Y un equipo que quiere pelear por títulos no puede ser el penúltimo que peor define sus grandes ocasiones en toda LaLiga. Solo hay que ver el salto de calidad del Barcelona con Lewandowski. Xavi ha encontrado su máquina de regalar puntos. O el seguro que tiene el Real Madrid con Benzema. Delanteros a los que no les tiembla el pulso.
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Mientras, el Atlético ha apostado por la cantidad de armas arriba (Morata, Cunha, João Félix, Griezmann, Correa y ahora Memphis) antes que por la calidad de sus puntos de mira. Nadie tiene ese perfil. Un mal endémico que conocen Simeone y Andrea Berta desde el último título de Liga (2020-21) y que se arrastra mercado tras mercado. Dusan Vlahovic era el nueve llamado a reinar en el área la próxima década... hasta que hubo que hablar de dinero. La Fiorentina no cedió, apareció la Juventus... y el serbio sigue en Italia.
En el fútbol no hay nada más cotizado que el gol. Y con la Premier de por medio, competir por la próxima gran figura se ha convertido en una misión prácticamente imposible. El Atlético se ha especializado en las páginas de segunda mano, arietes retirados de la primera plana antes de tiempo y en especial, regalados por el Barça. Y, ahora, el plan vira hacia Alemania. Marcus Thuram ha dado el salto en su carrera en el momento de encontrar nuevo destino. Un agente libre que, al más puro estilo NBA, está haciendo sus mejores números antes de salir al mercado. Ahora, el Atlético tiene que mostrar todos sus encantos para seducir al francés entre tantos pretendientes. Cuenta con la bala de Griezmann y quiere amarrar cuanto antes su presencia en la próxima Champions. No hay mejor opción que Thuram para el cartel que maneja hoy en día el club rojiblanco: Se busca nueve... pero que sea baratito.
