La ‘Mannschaft’, en manos de un madridista
Alemania, en manos de un madridista. Otra vez. Ya lo hizo en su día entregando la batuta a un tal Toni Kroos que, tras mover los hilos de la tetracampeona del mundo durante un total de once años, decidió retirarse tras la debacle que supuso la eliminación en octavos de la última Eurocopa. Ahora, el seleccionador Hansi Flick depositará sus confianzas en Rüdiger, central encargado de devolver la solidez a una defensa alemana que fue su talón de Aquiles durante las últimas grandes citas a nivel internacional. Sabe Flick que las opciones de los suyos pasan por volver a hacerse fuertes atrás y que Rüdiger es indispensable en dicha tarea.
A día de hoy, el del Madrid es el único defensor de garantías del que disponen los alemanes. Mats Hummels y Niklas Süle vienen de demostrar en este primer tramo de la temporada que siguen siendo demasiado irregulares para dotar a la zaga germana de la fiabilidad necesaria, mientras jóvenes talentos como Nico Schlotterbeck aún necesitan tiempo. Muy a diferencia de un Rüdiger que viene demostrando en todo un Real Madrid que es uno de los mejores; y con Alemania, actualmente, el mejor en su posición. Además de dominar todos los aspectos del juego, su inigualable carácter vuelve a convertir a un madridista en pieza esencial dentro del vestuario alemán.