Florentino cogió su fusil
El día 15 de diciembre el Abogado General del Tribunal de Luxemburgo emitirá un dictamen jurídico sobre la cuestión prejudicial que le planteó el magistrado Manuel Ruiz de Lara, que básicamente se reduce a definir si la UEFA goza de un monopolio con la Champions. Es una cuestión capital, porque la concentración de cualquier actividad va contra las leyes de la competencia de la Unión Europea. Pero no es una decisión fácil porque cada una de las partes defiende su posición con fiereza.
Se aproxima el día y en la esquina de la UEFA se ha pasado del “la Superliga está muerta”, (Ceferin, junio de 2021), o el “la Superliga es un proyecto de barra de bar”, (Tebas, noviembre de 2018), al “nada cambiará sea cual sea la decisión de Luxemburgo”, (Ceferin, septiembre de 2022), o al “desde el desconocimiento, FP -Florentino Pérez- lanza proclamas que pueden “matar” al resto de clubes, incluso al Real Madrid”, (Tebas, ayer). El otro ariete de la UEFA, el presidente de la ECA, Al Khelaïfi, multado por infringir el Juego Limpio Financiero con el PSG, bastante tiene de momento con las acusaciones de presunto secuestro y extorsión contra un empresario franco-argelino de las que está informando Liberation. Otro síntoma de que el fallo del Tribunal de Luxemburgo no está tan claro es que esta misma semana, el pasado martes, los dos partidos políticos mayoritarios en España, PSOE y PP, retiraron una enmienda conjunta que habían presentado para proteger a LaLiga de la Superliga.
Florentino Pérez, presidente de la Superliga y del Real Madrid, dedicó este domingo buena parte de su intervención ante los socios para defender la Superliga. “Con la política de la UEFA solo hubiese habido dos o tres Federer-Nadal”, dijo. Recordó además que, en los últimos 67 años, el Liverpool sólo ha jugado tres veces en Madrid, un dato demoledor. Uno de los compromisarios bromeó al final de la Asamblea: “La verdad es que, esta misma temporada, si quitaras al Leipzig y metieras al Deportivo, el grupo del Madrid en la Champions sería el Teresa Herrera...”. No sé si será para tanto, pero lo que sí está claro es que el Tribunal de Luxemburgo puede salir por proa o por popa, que Florentino no va a soltar el hueso y que, juntos y unidos, como van en este proyecto el Real Madrid y el Barcelona, pueden echarle un pulso a la UEFA.