Etta Eyong está fuera de su hábitat, el Levante le necesita
Desde el penalti fallado contra el Celta, Etta Eyong se ha venido abajo. El delantero camerunés acumula varios partidos fuera de su hábitat natural, lejos del área y su fútbol se resiente. En Mestalla, los de Corberán tenían claro que para neutralizarle debían emplearse con dureza. Tárrega lo cosió a faltas y también se llevó un recado de Pepelu. No hubo ninguna queja, ni protesta. Estuvo solo ante el peligro.
Aun así, Etta Eyong anda de capa caída. Venido a menos. Lo reconoció Calero en la previa, e incluso hizo alusión a la labor de recuperarle mentalmente después de la eliminación de Camerún. Un varapalo que tampoco explica su bajón, que ya lo arrastraba varias jornadas.
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Es más, Calero habló tras el partido que tanto ruido a su alrededor no ayuda, especialmente para un chico tan joven. Su irrupción ha elevado su nombre, pero también las expectativas. Quizá muchos pájaros en la cabeza, muchos rumores sobre un chico de 22 años que acaba de estrenarse en la élite. Para hacerse una idea, hace año y medio estaba en el Cádiz B. Hoy lleva seis goles y tres asistencias en Primera. Por ello, los rivales han tomado nota que eliminarle de la ecuación supone alejar al Levante del gol. Y ya van tres partidos sin ver portería. Etta, el Levante te necesita.
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