En busca del golpe de pedal perdido
Cuando uno deja de pedalear se cae, que es lo que le está pasando al Barça en estas últimas semanas en las que ha sumado un punto de nueve. Contraste con el arranque explosivo que le llevó a ganar todas las etapas y metas volantes en el inicio liguero. Alguien podría pensar que lo suyo sería sentarse en el bordillo de la carretera a reflexionar para volver a encontrar ese golpe de pedal perdido. Sin embargo, como uno se puede olvidar de algunas cosas pero no de andar en bici, lo mejor que le ha podido pasar es que el calendario haya dispuesto entresemana este partido en Mallorca, sin apenas tiempo para comerse el tarro después de dilapidar todos los ‘minutos’ de ventaja acumulados en la general ante su principal perseguidor.
Este Barça sabe pedalear llaneando o subiendo cumbres, como demostró juntando en apenas unos días una goleada al Bayern y otra al Real Madrid en el Bernabéu. Pretender descifrar siempre desde un estudio cartesiano por qué se producen estas ‘pájaras’ en equipos que marchan tan bien engrasados como la caja de cambios de una bicicleta de carreras es en ocasiones tan difícil como inútil. Puede que haya razones obvias y racionales o que simplemente sea un arcano más de eso tan esotérico llamado fútbol. Lo mejor es pues seguir pedaleando, que de eso uno nunca se olvida.