Noticias relacionadas
Xavi ya tiene su título. Y aunque fuese la Supercopa, lo ganó a lo grande. Con 3-0, el Barça convirtió en un rondo gigante el King Fahd y se dio un buen banquete con el Madrid. Sinceramente, lo necesitaba. La victoria contra el Madrid no sólo refuerza un proyecto. Sobre todo le va a permitir al Barça volver a pensar que puede competir contra los mejores. Psicológicamente, era un equipo que había entrado en barrena hace tiempo, instalado en una peligrosa condición de perdedor en las grandes noches.
En Riad, el Barça volvió a ser feliz. Cabalgó a lomos de un gigantesco Gavi, un jugador que maneja todos los registros: se desenvuelve con las dos piernas, va a los duelos, salta a por todas con fe y contagia al resto de sus compañeros. Su partido fue descomunal. El jugador más joven en marcar y asistir dos veces en un Clásico. Abandonó el campo junto a Pedri, el otro mago del centro del campo que este domingo pasaron por encima de Kroos y Modric. El partido y el torneo, en fin, se acabó cuando Lewandowski firmó el 2-0 antes del descanso. El Madrid no pudo más y Busquets, tal vez poco antes de anunciar que se va, levantó su primer título como capitán, el 31 de su carrera. El Barça vuelve a sonreír.
