El Madrid de los récords

El Real Madrid de baloncesto vivió el jueves un reencuentro entrañable con Pablo Laso, una leyenda de su banquillo, pero después de los honores no hubo piedad con su Bayern, que acabó como el resto de rivales que han pasado por el Palacio esta temporada en Europa. El Madrid ha batido a todos, menos al Barça, por 14 puntos o más, lo que ha generado ya un cierto miedo escénico. El equipo es imponente. El paso de Laso por la capital ha provocado un reconocimiento de su semilla, el grupo es en gran parte gracias a él. Pero también es el Madrid de Chus Mateo, que fue ocho años su ayudante y que en su segundo curso al frente dirige la orquesta con notas siderales. La pasada campaña, con menos, ganó una Euroliga milagrosa. En la presente, con mucho más, sobre todo con el apuntalamiento de la plantilla que supone el fichaje de Campazzo, ha protagonizado su mejor arranque desde que la Liga ACB y la Euroliga se disputan con sus actuales sistemas de juego. En la suma de los dos torneos lleva un balance de 25 victorias y 2 derrotas, que ascienden a 27-2 con el título de Supercopa.

Más allá de los números está la sensación de autoridad. Solo ha perdido dos partidos, ante Unicaja y Fenerbahçe, tras ceder ventajas notables. El desembarco de Campazzo es la clave, por supuesto, pero también el equilibrio de todas las líneas. Si acaso, falta un tirador tipo Carroll, pero ese rol lo van asumiendo entre todos, de momento con éxito. Otra razón, explicada por el propio Mateo, es “no ir más allá” y “el respeto al rival”. Lo que Simeone llama “partido a partido”. Una cuestión muy relevante. No olvidemos que en la temporada 2013-14 hubo un Madrid muy parecido, ‘el Madrid de los récords’, que encadenó 31 victorias, pero luego no ganó ni la Liga ni la Euroliga. Hay que mantener la tensión en el día a día, que hoy continúa ante el Obradoiro.

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