NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

El fútbol empieza a recuperar a Pedri

Se juega como se vive. Este Barça que roza lo ridículo en lo institucional, con un fichaje de 60 millones de euros, Dani Olmo, sentado de paisano en la grada con cuatro lesionados (Gavi, De Jong, Christensen y Ansu) porque el club que le ha contratado no le puede inscribir, ha arrancado la temporada con muy buena cara. Para empezar, con compromiso. Hacía tiempo que no se veía saltar a cinco jugadores del Barça para defender a uno de los suyos, Cubarsí, como en la última acción del partido. Tal vez esa elección de nuevos capitanes no era tan mala. Raphinha, interlocutor con Gil Manzano, se deja la vida. Se juega como se vive, y el Barça de Flick ha dado buenas señales en las dos primeras jornadas. Ha sido mucho mejor que dos rivales domésticos históricos, Valencia y Athletic. Y, sobre todo, ha dado la sensación de jugar con empaque el partido entero. El Barça de los últimos años ha dado una tremenda sensación de inestabilidad, con caídas a plomo en muchos partidos.

Futbolín. Flick quiere poner ese edificio recto. Para eso, le ha dado galones a Iñigo en defensa. Donde muchos veían un jugador en la cuesta abajo, él siente un líder. Seguramente alguien le ha contado que el año pasado compró un futbolín y lo llevó al vestuario para hacer piña. Es el futbolín en el que la semana pasada, Lamine, Pedri, Casadó y Héctor Fort jugaban a las dos de la mañana en la Ciutat Esportiva a la vuelta del partido contra el Valencia.

Luz. Marcó Lamine, que sabía que su amigo Nico no le apretaría demasiado en la frontal; y el Barça superó también esos impulsos de juventud que le están pasando factura a Cubarsí. Lo hizo gracias al tercer gol de Lewandowski, a quien, cuentan desde muy dentro, que Flick, por más que comparten representante (o precisamente por eso), le está apretando las tuercas.

Optimismo. Pero el jugador del partido, por muchas cosas, fue Pedri. Más allá de sus números (65 toques, 87% de acierto, cinco pases clave y cuatro de siete duelos ganados) fueron las sensaciones que dejó. Ni en la Eurocopa, antes de la lesión contra Alemania, se había visto un jugador tan participativo y, sobre todo, tan confiado. Pedri había dejado de intentar cosas que ahora vuelve a probar. Los pilates, la cámara hiperbárica, el agua helada. La oxigenación de los tejidos musculares, las horas de gimnasio y el refuerzo de la salud mental. Pedri lo está intentando todo para ver la luz. Esta puede ser la buena.

Sigue el canal de Diario AS en WhatsApp, donde encontrarás todo el deporte en un solo espacio: la actualidad del día, la agenda con la última hora de los eventos deportivos más importantes, las imágenes más destacadas, la opinión de las mejores firmas de AS, reportajes, vídeos, y algo de humor de vez en cuando.

Normas