Dos meses apasionantes para Karim
Carletto sabe perfectamente que estando en forma, Karim sigue siendo su futbolista más determinante. Los inevitables guadianas del francés, generados por el peso de su DNI, son controlados desde la caja mágica del cuerpo médico, donde se miden y dosifican los esfuerzos de los 23 hombres de la plantilla. Benzema es fundamental, pero ya no es necesario que juegue todos los días y Ancelotti lo sabe. Lo único imprescindible es que esté en esas ocasiones en las que su ausencia pasa factura. Ocurrió la temporada pasada con el desastroso Clásico del Bernabéu y por eso el genio de Reggiolo no va a volver a correr riesgos. Si el partido del Cívitas con el Atleti hubiese sido una final, seguramente hubiese forzado el próximo Balón de Oro para estar en la cita. Pero sólo era un partido más de Liga y lo que quiere Ancelotti es que esté a tope el 16 de octubre ante el Barça en el próximo Clásico...
Karim también ha aprendido a echar el freno de mano cuando conviene y así se ha ahorrado dos partidos con Francia que tampoco le hubiesen servido para nada, al estar ya su selección sin opciones en la Nations League. Sabe que entre el 16 de octubre y el 18 de diciembre va a tener dos meses cruciales para entronizar su carrera para la posteridad. El 16-O espera ser el MVP del Clásico y al día siguiente recibirá en París su primer Balón de Oro. Y después, en Qatar, tiene la oportunidad de conquistar el que sería su primer Mundial con esos Bleus que por circunstancias dolorosas le han tenido fuera de sus oraciones durante años. Karim sueña con conquistar Qatar el 18 de diciembre en la final y festejarlo el día siguiente con su 35 cumpleaños. Eso sería prestigio para él, para Francia y para el Madrid.