Dormimos a un puntito del Barça…

Otra vez a sufrir. No era noche para florituras ni fuegos artificiales. Venimos de donde venimos (sufrimiento sonrojante en Talavera con risitas de banquillo inadmisibles) y con un nivel de juego alejado de lo que el Real Madrid llama “la búsqueda de la excelencia”. Pero cuando se atraviesan guadianas que te impiden presumir, lo importante es facturar. O sea, ganar. Y este Madrid errático y ciclotímico ha sido capaz de hilvanar tres triunfos consecutivos (¡aleluya!). Y cuando estás saliendo de un gripazo, lo importante es ponerte el termómetro y comprobar que la fiebre ha bajado y que ya puedes empezar a salir a la calle. Eso sí, muy abrigaditos para evitar recaídas. Por eso y con un Bernabéu en alerta máxima (ambiental y competitiva), se trataba de tumbar al Sevilla de Almeyda con un triunfo tan necesario como terapéutico. Sin poder presumir mucho, de acuerdo. Pero dejando claro que después de tanta tormenta asomando por el horizonte se acuestan los hombres de Xabi Alonso a un solo puntito del Barça, que este domingo se la juega en Vila-real. He escrito bien. No juegan en Miami. Esta debe ser una Liga seria y así respetamos el sorteo celebrado en verano. El caso es que el Madrid se fue a la cama vivo en la Liga, en el Top-8 de la Champions, clasificado para los octavos de la Copa del Rey y a 18 días de afrontar en Yeda el asalto a la Supercopa de España. Y todo eso jugando regular, tirando a mal, y acostumbrándonos a aferrarnos a nuestro Courtois, el mejor portero del Mundo, y a Mbappé, el mejor jugador del planeta Tierra. Me recuerda a la época en la que los Galácticos ganaban con las paradas milagrosas de Casillas y los golazos siderales de Ronaldo Nazario. Con un porterazo y un gran ‘9’ se vive mucho mejor...

Pitos y flautas. Vayamos a las dos caras de una noche para reflexionar. Una vez más. La amable la empezó dibujando Bellingham, uno de los señalados de Talavera, que este sábado presentó su pliego de descargos como sólo hacen los grandes. El todoterreno inglés firmó un partidazo, de juego y de compromiso colectivo, y puso la guinda a su quite del perdón con un golazo de cabeza que abrió la lata ante un Sevilla que generaba sustos cada vez que se acercaba al área del anfitrión. La otra cara de la moneda la puso Vinicius, al que el Bernabéu le pasó una factura con carácter retroactivo recordándole las cosas que no debe repetir. La pitada va por su enfado fuera de lugar en su cambio del Clásico y las risas de la noche talaverana. Vini debe ser listo, descansar en este parón y regresar más comprometido que nunca y hablando en el campo, el escenario que últimamente tiene más abandonado. Por cierto, quitar su foto del Real Madrid en su cuenta de Instagram no es el mejor camino para la reconciliación...

Kylian@Cristiano. Era su sueño de niño y lo vio cumplido en una velada muy especial para él. Mbappé ha cerrado el año 2025 con 59 goles, igualando a su héroe de la infancia. Hizo bien en dejar la cuenta en 59 igualando el récord del portugués, porque Cristiano es INSUPERABLE. Lo celebró el parisino, en el día de su 27 cumpleaños, con empatía e inteligencia emocional al homenajear a CR7, que siempre le dio buenos consejos. Mbappé es el clavo ardiendo de este proyecto y conviene seguir arropándole. Si caen títulos en 2026 seguro que será en buena parte por su capacidad goleadora. Por cierto, muy bien Rodrygo una vez más. Por eso vuelve a ser titular. Y fue pisar su perfil bueno, el izquierdo, y sacar el penalti de la tranquilidad. Rodry sí va por el buen camino...

Feliz y blanca Navidad. En un día así me acuerdo de Ana, que sigue hospitalizada, y su inseparable David. Disfrutaron del triunfo desde la habitación. Feliz Navidad a todos/as, amigos.

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