De Rodrygo depende la Champions
Esta vez el Madrid sí cumplió milimétricamente con el guion que le tocaba y se ahorró sufrimientos extremos. No es que gestionara demasiado bien el partido, una vez está más que demostrado que es un equipo más de remontar que de suministrar las ventajas, pero Courtois salió a su auxilio en los peores momentos y Rodrygo puso el sello final para terminar por rendir al Chelsea. Del belga ya se ha escrito todo. Es el portero más decisivo de largo a nivel europeo y su impacto se amplía en lugar de reducirse. Al brasileño, receptor también de elogios más que merecidos, habrá que empezar a clasificarlo también como lo que su fútbol expone. Hay pocos jugadores más determinantes tanto desde el once como desde el banquillo. La cantidad de recursos de los que no hace ostentación gratuita le erigen en una figura imparable en contextos antagónicos. Es capaz de esperar en el área e inventarse una genialidad en espacios reducidos como en la ocasión que generó tras un pase de Carvajal, pero también resulta incontenible en las transiciones con una lectura y cambio de ritmo sencillamente maravillosos. En Stamford Bridge sacó al Madrid de un posible agobio, con la actuación cómplice de Vinicius y de Valverde.
Porque el equipo de Ancelotti, como es costumbre en la Copa de Europa y en su historia reciente, también pasó un mal rato. Otra vez Camavinga se vio demasiado solo porque Vinicius no retornaba. Aparecía Reece James demasiado suelto y Kanté atacaba la espalda del lateral francés. Suerte para el Madrid que Miliato y Alaba, también Rüdiger cuando salió, protegieron con esmero el área. A su vez, Havertz exhibió con crudeza la equivocación de Lampard de no alinearlo en la ida. El alemán hizo daño por dentro al bloque blanco con sus ofrecimientos, juego entre líneas y toques distintivos para dar alimento al pobre ataque general del equipo blue. Por este camino el Chelsea tuvo sus ocasiones, negadas como siempre por un Courtois imperial. El portero completó su trabajo y sus compañeros remataron la faena a la carrera con un Rodrygo extraordinario. Si el Madrid quiere retener la corona, necesita de Courtois, Militao, Vinicius y Benzema como ejes, pero también de Rodrygo. Su juego y sus goles son imprescindibles.
Bien abierto
Rodrygo ensancha el campo para recibir la apertura de Militao y se aprovecha del salto exagerado de Cucurella. Chabolah también busca cortar en lugar de recular. Errores imperdonables ante el futbolista brasileño.