Como un huevo a una castaña
Después de ganar bien al Villarreal Xavi ha dicho que su Barcelona se va pareciendo a lo que quiere. Perfecto, gran titular, pero habría que matizar aquí dos asuntos. ¿Qué quiere Xavi y cuan cerca ve a su equipo de conseguirlo? ¿Se parece como un huevo a una castaña? El fútbol son detalles y los detalles habría que conocerlos porque, de lo contrario, después de verle naufragar frente al Real Madrid y al Inter hace dos suspiros, uno puede caer en la tentación de pensar que viéndose cerca de lo que quiere nos está tomando el pelo. Que solo está ganando tiempo, escurriendo el bulto o cualquiera de estas artimañas que sin duda deben ser asignatura troncal en el curso de entrenadores.
La perfección no existe, pero hay que acercarse”, explica el entrenador del Barça. Para alcanzar esa perfección que Xavi parece rodar con los dedos aunque muchos estemos viendo un equipo irregular sostenido por la clase superior de Robert Lewandowski, uno de los temas que debe resolver el entrenador es el del mediocentro. Hernández reconoce que para ese puesto, fundamental, solo tiene a Busquets, lo que viendo el rendimiento reciente de Busi no deja muy bien a la dirección deportiva del club y mucho menos gustará a Franck Kessie, hasta el momento irrelevante. Y en estas ha aparecido Frenkie de Jong como solución.
De Jong como mediocentro, por mucho que la propaganda se haya empeñado en promocionarlo en las últimas horas, dista mucho del especialista ideal que hace años era Busquets. Si el catalán destacaba por la lectura de la posición y el tempo, De Jong solo ha cumplido haciendo justo lo contrario. “Es el que mejor divide del equipo”, reconoce Xavi, optimista. Yo añado que, si lo piensas, De Jong es la vida imagen de su Barcelona: vertical y llegador pero con una capacidad para perder los papeles digna de estudio. ¿Entregarla las llaves del equipo a un jugador de ese perfil es la mejor solución para encontrar cierta continuidad en el juego?
Xavi, como cualquiera que le haya visto alguna vez sobre el campo, cree que De Jong es más interior que mediocentro y eso solo lleva a una conclusión: como de interior ha sido un desastre en el Barça juega ahí porque hay que aprovecharlo de cualquier manera ahora que Busquets está fundido. Mal negocio. Están la defensa, el balón parado o el rendimiento de sus extremos, pero el del mediocentro es uno de los grandes problemas que debe resolver el entrenador para al fin, está vez de verdad, sin palabrería, acercarse solo un poco a la perfección.